Participada por Repsol

Gana Energía estrena tarifas de luz con las que asume el coste del tope al gas

Baja los precios renunciando a 300 euros por cliente de media, en un momento en el que a muchos contratos en el mercado libre les toca revisión y pasarán a sufragar también el mecanismo de ajuste.

Antonio Picazo, CEO de Gana Energía.
Gana Energía estrena tarifas de luz con las que asume el coste del tope al gas
Gana Energía

Gana Energía estrena tarifas de luz con el objetivo de captar clientes. La compañía valenciana ha puesto en marcha una oferta en la que asume "íntegramente" el coste que se derive de la compensación que reciben las compañías eléctricas por el tope al gas. Según su fundador, Antonio Picazo, la energética baja los precios "de forma muy agresiva" renunciando a 300 euros por cliente de media a un año vista.

La empresa cuenta con 100.000 clientes con contrato de suministro eléctrico y tiene en cartera una tarifa con tres tramos horarios (punta, llano y valle) y otra con un precio fijo para las 24 horas del día. El lanzamiento se produce en un momento en el que a muchos de los contratos del mercado libre que se firmaron antes del 26 de abril del año pasado les toca revisión y pasarán también a pagar por la excepción ibérica.

Repsol compró la mayoría de la empresa en marzo de 2021. Esta fue impulsada por Lanzadera y, tras la operación, los socios fundadores permanecen en el capital de la empresa de una forma minoritaria. Gana Energía, fundada en 2015, opera de forma online y ofrece energía 100% renovable. La empresa valenciana entró en Lanzadera en 2018 cuando tenía 12.000 clientes, 22 empleados y una facturación bruta de 10,5 millones de euros. 

Apoyo de Juan Roig

La 'startup' recibió durante más de dos años el apoyo de Marina de Empresas, iniciativa impulsada por Juan Roig, y posteriormente recibió la inversión de Angels, en una ronda por 500.000 euros que lideró. Además, entró en septiembre del 2020 en el mercado del gas natural y ahora cuenta con 3.000 clientes.

Según la normativa, el coste de la compensación de la excepción ibérica se reparte entre todos los usuarios del mercado eléctrico, menos en las Islas Canarias, Ceuta y Melilla y en los contratos con un precio fijo que sean anteriores al 26 de abril de este año, pues al tener cliente y empresa una tarifa pactada no se estarían beneficiando de la medida. Dicho de otro modo, sufragan el coste de la compensación los contratos con tarifa regulada, y a los contratos con precio fijo se les empezará a repercutir en el momento que les toque renovar. Ahí es cuando las eléctricas subirán el precio del mismo en la parte proporcional que les corresponda.

En las facturas del mercado regulado, este cargo va incorporado dentro del precio de la energía, mientras que en los recibos del mercado libre se muestra en una línea aparte. En ambos casos, el importe por cada kWh consumido es el mismo. Hay que tener en cuenta que el coste del tope al gas es variable y depende del día, por lo que no se puede calcular cuál será el precio final de la factura o tarifa total incluyendo este importe.

Además, desde diciembre, el Ministerio para la Transición Ecológica obliga a las eléctricas a informar con claridad sobre la compensación que reciben derivada del tope al gas. Deben incluir una nomenclatura estandarizada y transparente sobre el precio medio de ajuste. También deben incluir un enlace y código QR al comparador de ofertas de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), así como recomendaciones de ahorro y eficiencia energética.

Obligaciones del Gobierno

Desde el Ejecutivo vienen peleando para que quede claro que son las eléctricas las que deciden trasladar al consumidor el coste del tope al gas y les obliga a que introduzcan en el recibo "de forma clara e inequívoca", en un apartado independiente dentro de la factura de electricidad, la siguiente redacción: "Las comercializadoras en mercado libre pueden elegir voluntariamente repercutir el importe de la energía asociada a la compensación del mecanismo ibérico regulado por el Real Decreto-ley 10/2022, de 13 de mayo, dentro de sus costes de aprovisionamiento, o bien trasladarlo de forma diferenciada a sus consumidores. En este caso, su comercializadora ha optado por esta última opción".

La aplicación del tope al gas para la generación de electricidad, vigente en España y en Portugal desde el pasado 15 de junio, ha supuesto un abaratamiento de la factura de la luz en España de unos 209 euros por hogar desde su implementación, según los cálculos de EsadeEcPol, el centro de investigación de política económica de Esade. En concreto, la excepción ibérica fijaba un tope para el gas natural que se usa para la generación de electricidad de 40 euros/MWh durante los seis primeros meses de aplicación, para luego ir subiendo de 5 en 5 euros hasta llegar a los 70. Así, cada hora que se genera electricidad con gas, si su coste real es superior a dicha barrera (ahora de 45 euros/MWh), se remunera a las productoras por esa diferencia.

Endesa aviva la 'guerra'

Endesa también ha agitado recientemente la 'guerra' comercial entre las eléctricas para captar clientes. La compañía que dirige José Bogas ha lanzado una nueva campaña comercial dirigida a clientes domésticos con la que ofrece un mes de consumo de luz gratis cada año y para siempre si se contrata alguna de sus tarifas en el mercado libre. La promoción –conocida publicitariamente como 'Tu nuevo mes favorito'– estará disponible hasta finales de marzo para nuevos clientes residenciales y para aquellos clientes que ya tengan contratada alguna tarifa con Endesa y decidan hacer el cambio a Única, con la que se paga una cuota fija personalizada, "con energía renovable, sin permanencia y con bonificaciones a los consumidores por cumplir unos objetivos de consumo eficiente".

¿Regulada o mercado libre?

Tras la escalada de precios sin precedentes de la electricidad en el último año miles de clientes se han pasado de la tarifa regulada al mercado libre. Sin embargo, en enero hemos podido ver como la factura de la luz en el Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC) se ha situado como la más barata de los dos últimos años, en torno a los 60 euros. La bajada ha sido posible produce gracias a la mayor presencia de las renovables en el mix de generación. En concreto, a más producción mediante energía solar y eólica, más barato es el precio de la electricidad en el mercado mayorista. En los últimos días dominó el viento gracias al temporal y se hundió la producción con gas. Ahora queda esperar para ver si se mantiene la tendencia y vuelve a interesar más otra vez la tarifa regulada, más barata históricamente.

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