CaixaBank considera que la mala reputación del sector financiero es un desafío que pone en cuestión la sostenibilidad del negocio. Así lo ha expresado este jueves el consejero delegado de la entidad catalana, Gonzalo Gortázar, quien considera que la banca debería dejar de quejarse de su mala imagen y abordar el problema.
En un desayuno organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección en colaboración con Axis, el primer ejecutivo de CaixaBank ha identificado la poca rentabilidad, la transformación digital y la mala reputación del sector como los tres retos principales a los que se enfrenta el sector financiero en la actualidad.
Respecto a este último punto, el banquero lamenta que la sociedad tiene la percepción de que los bancos han costado dinero a los contribuyentes y de que no se ha tratado los suficientemente bien al cliente. Gortázar reconoce que el sector se “ha equivocado en muchas ocasiones” en lo referido a la comercialización de preferentes e hipotecas con cláusulas suelo, aunque sí que defiende que los bancos contribuyeron al rescate a través del Fondo de Garantía de los Depósitos (FGD) y que las entidades a las que se inyectaron ayudas "han dejado de existir”.
El directivo, no obstante, cree que el sector tendría que “dejar de quejarse” de su mala reputación y empezar a “abordar” el problema. “Las entidades que todavía estamos presentes tenemos que ser capaces de explicar en positivo lo mucho que hemos hecho bien”.
Es más, el ejecutivo de CaixaBank afirma que mejorar la reputación “es una prioridad máxima” ya que la mala imagen pone en cuestión la sostenibilidad del negocio. “Si los clientes no están satisfechos se producirán cambios regulatorios o condenas judiciales demasiado estrictas”, apunta el banquero que cree que la “mala reputación” dejará “empezar el partido con tres a cero” a los nuevos competidores digitales.
Para mejorar la rentabilidad, la fórmula que propone Gortázar, al igual que es resto de directivos del sector, es diversificar los ingresos potenciando el negocio asegurador y los fondos de inversión, entre otros productos, y reducir la base de costes. En este sentido, respecto al ERE (Expediente de Regulación de Empleo) de 2.000 personas que acaba de aplicar la entidad permitirá seguir apostando por el futuro.
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