Grupo Carso, el conglomerado mexicano propiedad del magnate Carlos Slim, remonta la crisis generada por la pandemia tras anotarse un beneficio neto atribuido de 2.673 millones de pesos mexicanos (113 millones de euros) en el segundo trimestre del año, frente a las pérdidas de 49 millones de pesos (2 millones de euros) registradas durante el mismo periodo del año pasado.
Ese acelerón de sus cuentas entre abril y junio se explica por unos mejores rendimientos operativos. En concreto, el resultado bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 4.187 millones de pesos (177 millones de euros), por lo que avanzó un 250% en relación al año anterior; mientras que la cifra de negocio se impulsó hasta los 30.003 millones de pesos (1.268 millones de euros), el doble que en el segundo trimestre de 2020.
El mejor rendimiento en la facturación del grupo se explica, en parte, por el contraste con el año pasado, cuando la mayoría de tiendas de su filial Grupo Sanborns se encontraban cerradas. De este modo, las ventas de Sanborns alcanzaron los 12.121 millones de pesos (512 millones de euros) entre abril y junio de este año, un 197% más.
Buenos resultados de las filiales industrial y energética
Por su parte, la cifra de negocio de la filial industrial, del Grupo Condumex, se incrementó un 102,2%, hasta los 11.013 millones de pesos (465 millones de euros), debido al alza en los precios de los metales y los mayores volúmenes de cables vendidos. Las ventas de la subsidiaria energética, Carso Energy, alcanzaron los 988,7 millones de pesos (418 millones de euros), un 257,2% más.
Los buenos resultados de estas filiales compensaron el descenso del 2,8% en las ventas de Carso Infraestructura y Construcción, que se situaron en los 6.070 millones de pesos (256 millones de euros). Entre enero y junio, el beneficio neto del grupo ascendió hasta los 4.623 millones de pesos mexicanos (195 millones de euros), lo que corresponde a un incremento del 123,9% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
