Heineken gana tiempo con Hacienda: la AN le exime de adelantar 8,5 millones

  • La Audiencia Nacional libra a la cervecera duela de Cruzcampo de entregar un aval para hacer frente a la sanción que le impuso la Agencia Tributaria.
Botellas de Heineken
Botellas de Heineken
Heineken

Las dos grandes cerveceras que operan en España (Mahou y Heineken) mantienen, desde hace años, serias discrepancias con la Agencia Tributaria. Disparidades de criterio que, en ocasiones, se han saldado en los tribunales a favor de las compañías. En esta ocasión es Heineken, dueña en España de marcas como Cruzcampo y Amstel, entre otras, la que ha logrado una pequeña victoria en esta pelea por cómo paga sus impuestos en España. 

La Audiencia Nacional ha dado la razón a la filial del grupo holandés que le exime, al menos temporalmente, de tener que entregar más de 8,5 millones de euros por impuestos que no abonó en el momento adecuado, a juicio de la Agencia Tributaria. En concreto, la Audiencia suspende la entrega de garantías para asegurar su pago, según determinó en noviembre la Sección Segunda de la sala de lo Contencioso. Eso sí, de momento, no entra en el fondo del asunto

Se trata, en este caso, de su Impuesto de Sociedades de los ejercicio 2010, 2011 y 2012. Hace ya más de tres años, en junio de 2015, la compañía firmó con la Agencia Tributaria "actas de disconformidad" por el importe que le reclama Hacienda, los citados 8,5 millones de euros. Además, firmó actas por otros 3,82, en esta ocasión, por discrepancias vinculadas a cómo abonó durante esos años el IVA. 

Heineken ya adelantó entonces que llevaría el asunto a los tribunales y que tenía "plena confianza" en que estos le darían la razón. De momento, sólo cuenta con el 'respiro' que le ha dado la Audiencia Nacional en cuanto a la entrega de garantías porque sus disputas podrían acabar dirimiéndose en el Tribunal Supremo

Además, el choque con la Agencia Tributaria ha continuado. La compañía explica en su memoria de 2017 que, el 27 de junio de ese año, volvió a firmar actas "en disconformidad". Esta vez, por "los ejercicios comprendidos entre 2013 y 2016". De ellos, "se derivó una deuda a ingresar de 6,8 millones euros", de los que 6,2 millones correspondían a la cuota y, el resto, a intereses.

"Heineken España ni está conforme con las mismas ni comparte los criterios aplicados por la Administración" por lo que, también, ha iniciado su recurso ante el Tribunal Económico Administrativo Central (TEAC)", justificó la compañía en su informe anual.

Heineken mantiene el pulso ante la Justicia mientras su principal rival, Mahou (dueña de San Miguel o Alhambra, entre otras marcas) ya ganó un pleito similar, de nuevo, en la Audiencia Nacional. En este caso, le dio la razón y evitó que tuviera que abonar al Fisco más de 11,8 millones de euros. Sin embargo, el choque entre industria y Hacienda está lejos de darse, de momento, por acabado. 

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