En su mercado de EEUU

Honda revisará más de 300.000 vehículos tras detectar problemas en los retrovisores

​El fabricante señaló que el problema nace con la cinta adhesiva utilizada en una almohadilla a la que está fijada el espejo, ya que esta no tiene suficiente capacidad de pegado, por lo que se puede desprender con la vibración.

Trabajador de Honda
Honda revisará más de 300.000 vehículos tras detectar problemas en los retrovisores
Honda

La marca japonesa de automóviles Honda ha tenido que solicitar la revisión de 330.318 vehículos en su mercado de EEUU después de detectar un problema grave en los modelos Odyssey, Passport, Ridgeline y Pilot, ya que esta incidencia puede provocar el desprendimiento de los espejos retrovisores situados en el exterior.

Según explica Honda en documentos presentados ante la Administración Nacional para la Seguridad en la Carretera de EE.UU. (NHTSA por sus siglas en inglés), los modelos afectados son los Pilot y Ridgeline de 2020-2021, así como los Passport y Odyseey de 2020-2022. Aunque todos estos sólo afectan al mercado de Estados Unidos. 

Honda señaló que el problema nace con la cinta adhesiva utilizada en una almohadilla a la que está fijada el espejo retrovisor, ya que esta no tiene la suficiente capacidad de pegado, por lo que se puede desprender con la vibración del vehículo y poner en riesgo la integridad del auto y los conductores.

Un problema de 2018

En los documentos presentados, Honda dice que el problema fue detectado inicialmente en diciembre de 2018 y, aunque el fabricante cambió la cinta adhesiva, en octubre de 2022 empezó a recibir informaciones sobre el desprendimiento de espejos retrovisores. Hechos que alteraron a los usuarios de estos coches.

Honda ha recibido 71 quejas en relación dicho problema, pero el fabricante no tiene información sobre posibles accidentes o lesiones. Los propietarios de los vehículos potencialmente afectados por el defecto serán notificados y los concesionarios de Honda reemplazarán los espejos retrovisores de forma completamente gratuita.

De esta forma, la firma japonesa se ha llevado un duro golpe que afecta a sus políticas de producción antes de que Honda empiece a dar sus primeros pasos dentro del mercado eléctrico junto a su aliada Sony, ya que ambas empresas anunciaron un acuerdo que fue aprobado por la Comisión Europea que les permite diseñar, desarrollar, producir, comercializar y vender vehículos eléctricos con una batería de alto valor agregado. 

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