Nuevo paso adelante de la familia Matutes para que Palladium gane peso en la gestión de hoteles en sus plazas estratégicas. La compañía hotelera va a ser la encargada de operar el próximo Hard Rock en España, según distintas fuentes consultadas por La Información. Se ubicará en el antiguo hotel Andalucía Plaza, en Marbella, donde el fondo suizo Stoneweg se hizo propietario del establecimiento el pasado mes de noviembre y anunció una reforma para reposicionar el activo bajo la enseña estadounidense una vez terminadas las obras en verano de 2022.
El acuerdo se anunciará esta semana y supondrá el tercer Hard Rock de Palladium en España, después de los dos que tiene en territorio insular: uno en Ibiza y otro en Tenerife. El primero se inauguró en 2014 tras hacerse con el derecho de uso de la licencia de la marca estadounidense. Se ubica al lado de Ushuaïa Ibiza Beach Hotel, su buque insignia, en la cotizada Playa d’en Bossa. El segundo hotel es un resort con 637 habitaciones (236 son suites) que se distribuyen en dos torres. Ambos tienen una categoría máxima de cinco estrellas.
La hotelera española deslizó durante la última edición de Fitur que iba a comunicar en las próximas semanas un nuevo acuerdo de este tipo. Tocaba hacer cábalas, ya que Hard Rock ha optado en otras ocasiones por operar los hoteles con operadores de marca blanca. Es lo que sucede con el Hard Rock de Madrid, el primer hotel urbano de esta marca en España y cuyo casero es el fondo ASG, quien, curiosamente, lleva tiempo peinando el mercado en busca de comprador. Este establecimiento volvió a abrir el pasado verano tras la pandemia del coronavirus y después de haber acometido una inversión superior a los 20 millones de euros.
El acuerdo afianza la estratégica de Palladium de alejarse de un perfil patrimonialista y entrar únicamente como operador de los hoteles a través de Palladium Gestión SL, el brazo de la hotelera constituido en 2020 después de que Abel Matutes Prats tomara el relevo generacional de la cadena y fuera nombrado consejero delegado -su padre sigue como presidente-. De hecho, de acuerdo a datos de la propia compañía, el 100% de los establecimientos que explota son ya bajo el modelo de gestión aunque, eso sí, el propietario de los hoteles que opera es en la mayoría de los casos la familia balear.
La intención de separar propiedad y gestión es una tendencia cada vez más consolidada en el sector hotelero, aunque España sigue estando rezagada todavía en esta fórmula respecto a otros países, según recuerdan las fuentes consultadas por este diario. Otras hoteleras familiares han ejecutado operaciones similares en este sentido, en las que han entrado a gestionar nuevos hoteles de la mano de fondos de inversión o socimis. Por ejemplo, Meliá alivió su deuda con Bankinter con el traspaso de ocho hoteles a la socimi de la entidad financiera y Barceló llegó a distintos acuerdos con Blackstone (HI Partners) para emprender una nueva etapa de crecimiento.
Los Matutes y otras familias hoteleras optan cada vez más por centrarse solo en la gestión del hotel y dejan la propiedad en manos de grandes fondos
Stoneweg, por su parte, cierra con Palladium el primer contrato de gestión, habida cuenta de que nunca antes habían alcanzado un acuerdo en este sentido. El fondo estadounidense ha cerrado recientemente otras adquisiciones en España y tiene en mente anunciar nuevas operaciones en el futuro. El inversor compró al grupo H10 el antiguo Andalucía Plaza de la mano de Bain Capital, con quien también se alió para hacerse con el emblemático hotel Los Monteros. Desde su aterrizaje en el país, en el año 2015, el fondo suizo ha invertido más de 1.400 millones de euros en proyectos de desarrollo, sumando otros activos inmobiliarios (residencias y oficinas, principalmente).
Ahora, el Andalucía Plaza será muy distinto. Pasará de 400 habitaciones a 384, incluyendo 50 suites. En cuanto a la estética, el establecimiento respetará la decoración de las habitaciones de Hard Rock. La finalización de las obras y la inauguración del nuevo complejo están programadas para el próximo verano, concretamente para finales del mes de junio. El objetivo es convertir el hotel en una referencia en la Costa del Sol, donde el sector parece haber terminado con la crisis sanitaria, habida cuenta de la recuperación experimentada en el nivel de precios.
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