La huelga de Vueling finaliza con un acercamiento en el conflicto salarial

La huelga de los TCP (tripulantes de cabina de pasajeros) de Vueling ha llegado a su fin con un acercamiento de las posturas respecto al conflicto salarial. Ambas partes han cedido tras la escasa incidencia del parón en la operativa de la aerolínea, la cual ha operado cerca de un 90% de los vuelos que tenía previstos de manera inicial. 

Los paros, convocados por el sindicato Stavla, arrancaron en noviembre y han tenido lugar desde entonces todos los viernes, domingos y lunes, además de los días 1 de noviembre; 6, 8, 24 y 31 de diciembre; y 5 de enero. Fuentes de la empresa consultadas por EFE señalan que las conversaciones con Stavla se retomaron la semana pasada y que su intención es poder alcanzar un acuerdo acerca del cuarto convenio colectivo de estos trabajadores en el mes de marzo.

De hecho, el sábado 21 de enero, Stavla, que es mayoritario en el colectivo de TCP de esta aerolínea, ya informó de que apreciaba "un acercamiento de posturas" con la dirección en este conflicto salarial. Dirección y sindicatos mantienen varias reuniones semanales para abordar este nuevo convenio, que afecta a unos 2.200 trabajadores.

"El objetivo de la huelga es conseguir una actualización salarial del 13,4 % para el año 2022"

Stavla destacó que la prioridad de esta huelga era conseguir la actualización salarial durante el pasado 2022. Los representantes de Vueling han recordado que, desde el inicio de las movilizaciones, la subida salarial reclamada por este sindicato se añadiría al aumento del 6,5 % acordado por la empresa y CCOO en agosto (sin el acuerdo de Stavla, que es mayoritario).

La aerolínea ha cancelado durante esta huelga de forma preventiva los vuelos no protegidos por los servicios mínimos, a fin de evitar posibles incidencias. Ello ha hecho que el conflicto no afectara a su día a día, pues los vuelos se han cancelado con semanas de antelación y la dirección ha ofrecido a los clientes afectados reubicarse en otros vuelos.