Nuevo episodio en el periplo de Iberia para hacerse con Air Europa. International Airlines Group, dueña de la compañía española, y Globalia han llegado a un acuerdo para ganar tiempo en la operación y apartar de la carrera a otros competidores. La fórmula ha sido la concesión de un préstamo no garantizado de 100 millones de euros a siete años por parte del grupo hispano-británico a la compañía de la familia Hidalgo. El crédito estará sujeto a las aprobaciones regulatorias pertinentes e IAG se reserva así la opción de convertir ese préstamo en una participación de hasta un 20% en el capital de Air Europa.
El consejero delegado de IAG, Luis Gallego, ha asegurado ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que la aerolínea sigue "convencida" de la "importancia estratégica de esta operación para el desarrollo y la competitividad del hub de Madrid". Además, ha recordado que, desde que se iniciaron las negociaciones para la compra de Air Europa "el mundo ha cambiado". Así, "este acuerdo dará tiempo para evaluar con exclusividad estructuras alternativas que puedan ser de interés para ambas compañías y que ofrezcan beneficios significativos para sus clientes, empleados y accionistas", ha señalado.
Este nuevo acuerdo está condicionado a que Globalia reciba la luz verde por parte de los bancos sindicados que facilitaron el contrato de préstamo parcialmente garantizado por el Instituto de Crédito Oficial (ICO) y de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que prestó 475 millones a través del fondo de solvencia para empresas estratégicas (Fasee) que se constituyó con motivo de la crisis sanitaria.
Iberia aparta a nuevos competidores
La solución permite que Iberia aparte de la carrera por Air Europa a otros competidores. La aerolínea de Globalia estaba negociando ya con otros rivales, como reconoció el propio Gallego y Javier Sánchez-Prieto, CEO de Iberia, en un encuentro con periodistas con motivo de la presentación de sus resultados anuales. Juan José Hidalgo, máximo accionista de Air Europa, estaba libre para abrir conversaciones con nuevos candidatos porque no existía ningún periodo de exclusividad tras la ruptura del acuerdo en diciembre de 2021.
Ahora la situación es distinta. Iberia consigue con este préstamo un periodo de exclusividad de un año para negociar por la compañía y otro periodo de dos ejercicios en los que se guarda el derecho de tanteo. Al mismo tiempo, los 100 millones solo se podrían convertir por el 20% del capital, por lo que mantiene su línea roja para no consolidar en su balance la deuda de Air Europa. También se reserva una cláusula de salida en el caso de que la familia Hidalgo decidiese finalmente apartar a Iberia de la ecuación y vender la compañía a un tercero.
Quien también gana con este acuerdo es el propio Juan José Hidalgo, que en las últimas semanas afirmó públicamente que no iba a vender Air Europa y quería seguir en solitario. De culminar esta opción, el fundador de la compañía habría arrancado a Iberia 175 millones de euros sin necesidad de ceder el control de la aerolínea. El directivo salmantino se resarce así al ver roto el primer acuerdo de 1.000 millones de euros (noviembre de 2019) y el segundo por la mitad (enero de 2021).
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