Indra será la encargada de llevar a cabo los trabajos de consolidación y publicación de los datos del escrutinio en las elecciones generales del próximo 23 de julio. El Gobierno deberá firmar en los próximos días el contrato para que haya tiempo suficiente para completar los preparativos y pruebas previas. El precio a abonar a la compañía semipública tiene el tope de los 13 millones de euros con impuestos fijados en el acuerdo marco en el que fue la única licitante después de que otras compañías como Scytl no presentara credenciales.
Todo estaba previsto para que los próximos comicios tuvieran lugar en el mes de diciembre. Sin embargo, el giro in extremis del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ante la fuerte caída del PSOE en las municipales adelantará el proceso. Y esto hace que haya que acelerar todos los preparativos y la infraestructura tecnológica. Pese a que este adelanto implicaría un cierto quebradero de cabeza para el Ministerio del Interior, el acuerdo marco suscrito entre ambas partes allana el camino en estos cambios 'exprés' de calendario.
Ese acuerdo marco con la Dirección General de Política Interior establece a Indra como única licitante. Tiene una duración de cuatro años y contempla todos los comicios organizados por el Estado: las municipales, que acaban de tener lugar, las generales y las europeas. Éstas últimas están previstas para 2024. Este formato de adjudicación sirve para elegir a las potenciales adjudicatarias y agilizar los procedimientos posteriores. Tras ese primer trámite, sólo hay que pedir una oferta a las elegidas y a partir de esa propuesta se designa al elegido. En el anterior, la empresa dirigida por José Vicente de los Mozos compartió espacio con Scytl. En el que se firmó a principios de este año se quedó sola.
Firma del contrato inminente
Indra presenta oferta para posteriormente recibir el respaldo del Gobierno y la firma del contrato. Esto tendrá que producirse en los próximos días para cumplir plazos. En ese acuerdo suscrito previamente, la compañía calcó el tope máximo sin IVA establecido por Interior: 11 millones de euros en un único proceso electoral o 13,2 millones en caso de que coincidieran dos comicios a la vez. De esta forma, la compañía tiene un techo de hasta algo más de 13 millones de euros con impuestos para ofertar. No hay competencia con ninguna otra empresa, como sucediera en el pasado, así es que no existe un incentivo especial por hacerlo.
El precio tope de 13 millones con IVA es muy superior a los 7,4 millones cobrados por Indra en los últimos comicios celebrados a finales de 2019
La factura pública estará por debajo de los 13 millones de euros, pero obviamente no muy alejado de ese nivel. Esto supondrá un crecimiento muy relevante de lo que la compañía ingresó en el último contrato de unos comicios generales. Fueron las elecciones de noviembre de 2019. En aquel proceso, se abonó 7,2 millones de euros con impuestos incluidos. Era la cantidad idéntica a la cobrada en abril de ese mismo año por las primeras votaciones, cuando la empresa semipública 'tiró' la oferta para arrebatársela a la catalana Scytl. Las circunstancias de aquella fecha fueron muy diferentes. Se hizo con un procedimiento de emergencia 'a dedo' (reservado para casos como las catástrofes naturales) dados los plazos estrechos tras la nueva convocatoria.
La adjudicataria de este contrato se encarga de dotar de medios materiales a las Juntas Electorales (equipos informáticos y software para la gestión de las candidaturas), distribuir dispositivos para la transmisión de la información a los representantes de la administración o poner a disposición el centro de procesamiento de datos -el encargado de la recepción y tratamiento de la información electoral- en uno de los pabellones de Ifema en Madrid. Por último, la puesta en marcha de la web de Interior para la difusión de los resultados provisionales aportados por las mesas.
17 millones con autonómicas
Indra acaba de finiquitar un 'combo' de elecciones municipales y la totalidad de las regionales, algo que no pasaba desde hace casi una década. Scytl, el que fuera el gran rival, optó por no participar en ninguno de los proceso electorales de las comunidades autónomas (en el pasado ambas se 'repartían' los territorios). Esto hizo que el grupo presidido por Marc Murtra llevara a cabo la consolidación y gestión de los datos del escrutinio ejecutado por los miembros de las mesas en los 14 comicios de las CCAA y ciudades autónomas, junto con las locales. Por estas últimas sumó cerca de 10,8 millones de euros con impuestos. Por las otras aglutinó una facturación de más de 17 millones.
En este pasado 28 de mayo, con una complejidad relevante por la coincidencia de tantos procesos a la vez, se detectó una "incidencia en el servicio que afectó a la difusión de los resultados a través de la página web del Ministerio. El grupo español lo achacó al "exceso de tráfico". "El sistema de protección ha detectado un exceso de tráfico y ha bloqueado el acceso a la página web de difusión", aseguró la compañía ese mismo domingo electoral. Más allá de los trabajos vinculados al escrutinio, Interior también cuenta con varias compañías 'reclutadas' a través de un acuerdo marco a las que tendrá que pedir ofertas para cubrir el resto de servicios vinculados a las elecciones. Entre estos está la adquisición de cabinas y soportes señalizadores de meses y colegios electorales, las urnas de votación o las actas.
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