Indra presentaba el martes, al cierre de mercado, sus resultados de los nueve primeros meses del año. La compañía lograba un beneficio neto de 84,5 millones de euros, lo que supone un 75,7% más de lo que ganó en el mismo periodo del ejercicio anterior.
Además, sus ventas alcanzaron los 2.116 millones de euros, lo que supone un incremento del 8,5% y un aumento del 7,8% en moneda local. La compañía explica, en la nota remitida a la CNMV, que esta mejora de los ingresos se debe a la aportación de Tecnocom y a la aceleración del crecimiento orgánico de Indra en el tercer trimestre (+7%), especialmente en los negocios de elecciones y tráfico aéreo.
Excluyendo el impacto derivado de la adquisición de Tecnocom, las ventas en los nueve primeros meses de 2017 se hubieran situado en 1.950 millones de euros, un 1% menos en moneda local y estables en términos reportados.
Los resultados parecen ser positivos a tenor de su comportamiento en el parqué. Indra lideró los ascensos del Ibex 35 con un rebote del 3,78% y el precio de sus acciones se situaron en los 12,36 euros. Por tanto, la compañía se aleja de los mínimos de mayo en los que cerraba el día de ayer y se desmarca del comportamiento negativo del Ibex.
Desde Renta 4 han señalado que los resultados superan en un 2% su previsión de ingresos pero aún más sorprendente ha sido el dato del resultado operativo (ebit) al batir en un 13% el pronóstico de Renta 4 y en un 23% el del consenso.
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