Crecimientos de doble dígito

La banca se prepara para un ejercicio récord en los ingresos por intereses

El Euríbor seguirá apreciando las carteras de crédito, en un año que no se espera un incremento de los volúmenes. También la subida de las rentabilidades de la deuda soberana apuntalará estos crecimientos. 

La banca presentará unas provisiones contenidas por la resistencia del empleo
Los ingresos básicos de la banca se expandirán en 2023 a niveles no vistos
EUROPA PRESS

Los bancos que cotizan en el Ibex 35 no solo han presentado sus cuentas de resultados para el ejercicio 2022, sino que han ido dando sus guías para este 2023. Y como común denominador, todas las entidades esperan que el margen de intereses experimente un crecimiento de doble dígito alto, “high teens” como se han referido tanto Unicaja Banco como Banco Sabadell. Esto es del 15% hacia arriba, sin que ello sea gracias a un aumento del volumen del crédito.

Nuria Álvarez, analista de Renta 4, señala que no recuerda en los últimos años un crecimiento tan espectacular del margen de intereses, también porque, como añade la experta, veníamos de un entorno de tipos negativos desde hace casi una década, con muchos cambios en el sector financiero, con concentraciones y fusiones. Álvarez explica que, para ver subidas similares, habría que remontarse a los años anteriores al estallido de la burbuja inmobiliaria. Pero en esta época, este crecimiento del margen de intereses venía por un alto volumen del crédito.

Dos serían los factores que explicarían estas cifras que, como destacan fuentes del mercado, serán excepcionales y solo se ceñirán a este ejercicio. El primero de ellos es el Euríbor. Su impacto en la apreciación del crédito hipotecario se comenzó ya a ver en el último trimestre del año (acabó 2022  en el 3,018%). Esto permitió que Caixabank mejorarse en un 33% su margen de intereses. Es más, los analistas de Credit Suisse destacan que fue el artífice del primer salto de los ingresos de la entidad, que ha estado muy por encima de las expectativas del consenso. 

Y para para 2023 deberá ir a más. Así, los expertos de Caixabank Research esperan que el Euríbor a 12 meses se sitúe en el 3,5% de media, terminando de impactar en las hipotecas que todavía no hayan sufrido todo el golpe de la subida de tipos. No hay que olvidar que no fue hasta abril cuando el Euríbor se situó en positivo, y que hasta septiembre de 2022, el índice al que se referenciaban la mayoría de las hipotecas cotizaba por debajo del 1%. Esto puede suponer una diferencia de hasta 400 puntos básicos de un año a otro. Precisamente, Unicaja Banco ponía por ejemplo, para justificar sus previsiones de 2023, que la mitad de su cartera de crédito hipotecario había acabado el ejercicio pasado con el Euríbor en negativo como referencia. 

Así, los expertos del sector financiero creen que será esta mejora del precio del crédito la principal fuente de engorde de los ingresos de las entidades, ya que los bancos, en sus guías, no esperan un incremento de los volúmenes, para este año. De hecho, fuentes del sector financiero creen que apenas crecerá o terminará 2023 con ligeras caídas.  

¿De cuánto es esta mejora?  Caixabank estima cerrar el año con un margen de intereses en torno a 9.000 millones de euros, lo que implica una subida del 23% interanual, con comisiones y otros ingresos por seguros entre 5.100 y 5.200 millones de euros, en línea con los 5.100 millones de 2022. Los analistas de Credit Suisse destacan que “la orientación actualizada de la dirección pinta un panorama cada vez más optimista para el crecimiento de los ingresos básicos para este año”. En el caso de BBVA, la mejora será del 20%, aunque Onur Genç, el consejero delegado de la entidad, achacó esta evolución, además de al comportamiento del Euríbor, a otros negocios que aportan mayores márgenes como son el de las tarjetas de crédito y los préstamos personales. También espera un incremento del margen de intereses de alrededor del 15% tanto Banco Sabadell como Unicaja Banco, mientras que Banco Santander evitó concretar cifras, con la mirada puesta en el Investor Day, que se celebrará el próximo 28 de febrero.

Aunque es muy difícil hacer previsiones en un entorno tan cambiante como el actual, para 2024  no se repetirían estas cifras, ya que el incremento de los ingresos básicos se quedaría en tan solo un dígito, destacan los analistas, descontando una caída de los tipos de interés, pero también dependerá de la evolución de otras magnitudes, entre ellas, el coste del pasivo, si finalmente se comienzan a remunerar los depósitos.

El año de la deuda pública

El segundo factor que actuará como viento de cola para los ingresos básicos de la banca será la revalorización de la cartera ALCO, es decir, de deuda soberana, al calor de la subida de las rentabilidades. También en 2022 comenzó a darse una rotación de sus activos, que permitía que ir renovando los vencimientos de deuda soberana con rentabilidades bajas por otros, con duraciones medias, más altas.

Así, mientras se produce el impacto definitivo, ya se empiezan a apreciar sus efectos. Como ponen de relieve desde Credit Suisse, y en relación a Caixabank, “la cartera ALCO cayó hasta los 69.800 millones de euros (todavía muy por debajo del objetivo de 90.000 millones de euros), si embargo, los rendimientos totales aumentaron hasta el 0,8%”. También Banco Sabadell registró una mayor contribución de esta partida en el margen de intereses de 2022. Sin olvidar que las entidades financieras también han sucumbido al furor por la deuda soberana española y cuentan en su poder, según datos de noviembre, con más de 150.000 millones de euros en deuda del Estado.

Mostrar comentarios