España cuenta con más de 473.000 estudiantes universitarios que buscan alojamiento cada año, según datos del Informe CRUE de 2017, pero las plazas de las residencias destinadas para este colectivo apenas superan las 93.000. Como consecuencia se ha generado un nicho de negocio que algunas empresas han sabido aprovechar muy bien: el alquiler de pisos por habitaciones. Esta fórmula supone una rentabilidad aún mayor a la de la forma tradicional de alquiler de inmuebles y empresas como Beroomers, Alumni o Uniplaces han aprovechado este hueco en el mercado para establecerse y crecer en el mercado inmobiliario.
España es un destino cada vez más popular para los estudiantes universitarios extranjeros y cada año casi 150.000 de ellos, según datos del Ministerio de Educación, llegan a los centros por diversos convenios de colaboración o buscando perfeccionar la lengua castellana. Precisamente, son estos estudiantes los principales demandantes alojamiento a través de estas empresas de alquiler de habitaciones, según indican a La Información desde el sector.
Según Uniplaces, el mercado de alquiler para estudiantes en España el año pasado supuso más de "382 millones de euros en contratos" con una renta media de 546 euros al mes. Los estudiantes internacionales son los que más apuestan por este tipo de alojamientos, "suponiendo un 88% del total de los acuerdos" y también los que más gastan. Además, desde la compañía afirman que las reservas que incluyen los gastos son las que más atraen a los estudiantes y sus familias, ya que el 68% de las transacciones incluían estas cuotas.
Otras empresas como Beroomers, que comenzó como un negocio independiente de alquiler de habitaciones para estudiantes desde Valencia consiguió el apoyo de red de servicios para universidades del Banco Santander el pasado año. Ana Botín invirtió en la startup valenciana a cambio de convertirla en el 'partner' exclusivo de Universia después de que esta pasase por varias aceleradoras. A día de hoy, este programa de Banco Santander cuenta con más de 1.300 universidades socias en 20 países iberoamericanos.
Las residencias tampoco se quedan atrás
El informe "Emerging Trends in Real Estate Europe" de la consultora PwC confirma el gran nicho de negocio que supone el alojamiento para estudiantes. Pero no solo los pisos, las residencias dedicadas para este colectivo también se han transformado. En el caso de España, en el último año se ha producido la entrada de inversores internacionales en este ámbito con compras como la de RESA por parte del fondo de inversión de AXA y de CBRE GI por unos 400 millones de euros el pasado mes de septiembre.
Pero esta no fue la única venta de 'activos alternativos' el pasado año. Global Student Acommodation adquirió el pasado mes de junio Nexo Residencias por 180 millones de euros al fondo de inversión Oaktree. Con esta operación, GSA consiguió hacerse con 2.234 plazas.
El Fondo Europeo 'Catella European Student Housing Fund' también se hizo con La Campana, en Pamplona, y el The Student Hotel de la antigua Cuesta de San Vicente 28 de Madrid con el fin de convertirlo en una residencia universitaria de 300 habitaciones que abrirá sus puertas en septiembre de 2019.
El negocio de las residencias universitarias en España comenzó a desarrollarse en los años 90 y en los últimos años se ha modernizado. Además, las plazas de este tipo de alojamiento se sitúan en 93.653 y podrían llegar a las 100.936 en el año 2019 según una estimación de la consultora inmobiliaria JLL. En estos últimos años, los centros de las universidades públicas han reducido su número de plazas de forma significativa, mientras que las residencias de gestión privada no vinculadas a la universidad han tenido una "evolución claramente positiva".
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios