El Grupo Francisco Hernando Contreras, la sociedad personal del empresario conocido como El Pocero, suma un año más sin ningún ingreso en su cuenta y en el último ejercicio ha perdido 2,58 millones de euros. A pesar de la situación de su holding, El Pocero mantiene cargos en 48 sociedades, según el Registro Mercantil, y ocupa una de las posiciones más destacadas de la lista de morosos de Hacienda.
El empresario que construyó la urbanización 'El Quiñón', en Seseña, lleva sin percibir ingresos a través de esta sociedad desde el año 2013 cuando sus cuentas marcaron una cifra de negocios de 359.801 euros. Estos datos resultan irrisorios en comparación con los que obtenía durante en los grandes años del ladrillo. Por ejemplo, en 2005, la sociedad consiguió 177 millones de facturación y los beneficios superaban los 100 millones de euros.
Pero las pérdidas no son nuevas. El ejercicio de 2016 ya fue duro para el madrileño que perdió 1,78 millones de euros sin identificar en sus cuentas la razón de estos datos. En cambio, en el último año el resultado ha sido aún peor: las pérdidas se elevan hasta los 2,58 millones de euros. Estos datos son atribuidos en el informe de las cuentas de la compañía a la "venta de participaciones sociales de Lady Mónica II", una sociedad constituida en el año 2004 dedicada al negocio de las embarcaciones y las motocicletas.
De hecho, tan importante era para Hernando esta sociedad, que le puso el nombre de su primera embarcación, Lady Mónica. Un barco que fue el primero, pero no el único, en el que se pudo ver al por entonces 'Rey del ladrillo'. Se hizo con él en el año 1985, justo antes de arruinarse por primera vez al no poder llevar a cabo un macroproyecto inmobiliario en la localidad madrileña de Villaviciosa de Odón.
Según admite la sociedad a través de su memoria, las pérdidas del holding en ejercicios anteriores ascienden a 24,32 millones de euros. Pese a ello, la sociedad sigue contando con un único trabajador y registró unos gastos de personal de 5.861 euros en el último ejercicio.
Pero 'Grupo Francisco Hernando Contreras' no es la única sociedad de El Pocero, también es gerente de 'Obras Nuevas de Edificación 2000', a través de la cual tiene una importante deuda con la Hacienda Pública. 86 millones de euros es la cantidad que este organismo le reclama, tal y como aparece reflejado en la lista que el ministerio publicó el pasado mes de junio.
En su intención de diversificar sus negocios más allá del ladrillo El Pocero se hizo con una empresa de jets privados, 'Jets Personales' y con un periódico, 'El Semanal de Seseña', pero tampoco estos negocios fueron su salvación.
El empresario se hizo conocido tras poner sobre la mesa un macroproyecto de 13.500 viviendas en El Quiñón, un paraje casi 'desértico' en la localidad toledana de Seseña a principios de los dos mil. De la idea inicial, finalmente solo se puso en marcha la construcción de unas 5.000 propiedades que llegaron justo en medio del 'boom' inmobiliario. En total, una inversión de unos 6.000 millones de euros para tratar de hacer habitable una zona que hasta entonces solo era campo.
Ante las dificultades de liquidez de la promotora de Francisco Hernando, en el año 2009 los bancos se quedaron con unas 2.000 viviendas que no se habían conseguido vender, según el alcalde de la localidad de aquel momento, Manuel Fuentes. El sueño de ser promotor de un niño de Vallecas se resquebrajaba así con el estallido de la burbuja inmobiliaria.
A pesar de ello, en los últimos meses y derivado del aumento de los precios de la vivienda que está sufriendo el mercado, las propiedades que durante la crisis estaban vacías están volviendo a recibir habitantes. Lo que en su momento fue una ciudad fantasma, vuelve a resurgir de sus cenizas en los inicios de lo que podría ser un nuevo auge del sector.
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