Deliveroo cambiará su cúpula. La compañía de entrega de comida a domicilio ha anunciado hoy internamente la salida de Diana Morato al frente de la filial en plena batalla judicial por su modelo de 'riders' y con numerosos frentes con la Inspección de Trabajo. La tecnológica espera anunciar su sustituto próximamente. Mientras tanto, la directiva se mantiene en su puesto para liderar una transición hasta marzo.
Morato se puso al frente de Deliveroo España desde su arranque a mediados del año 2015. Provenía de Zipcar, el servicio de car-sharing en España, donde también era la responsable para el equipo español. En este tiempo ha tenido que lidiar con los numerosos problemas legales surgidos tras la implantación de un modelo laboral con sus repartidores que acarrearon juicios, huelgas y varias sanciones.
Fuentes conocedoras confirman a La Información que ha sido hoy cuando se ha anunciado internamente la salida que ha sorprendido a buena parte del equipo español. Un portavoz de la compañía descarta que se trate de un despido, sino de una salida voluntaria. No hay un nombre aún para sustituirla. "Se anunciará próximamente", se limitan a segurar. Se baraja alguno de sus homólogos en otros mercados europeos, como el italiano.
Un modelo muy polémico
Morato ha gestionado durante este tiempo un aluvión de casos judiciales contra el modelo laboral implantado por la empresa en España. Un modelo que ha sido 'castigado' en varias ocasiones por la Inspección de Trabajo en Valencia o Madrid, acarreando sanciones significativas.
En el caso de Madrid, la Tesorería de la Seguridad Social exige a la compañía 1,2 millones de euros en cotizaciones sociales de más de medio millar de 'riders' de la comunidad. El juicio quedó suspendido a finales del pasado mes de diciembre hasta el próximo mes de mayo.
En este tiempo la compañía también ha sufrido varios reveses en los tribunales. En junio, el Juzgado de lo Social Número 6 de Valencia confirmó que sus 'riders' son 'falsos autónomos'. Y la compañía decidió finalmente no recurrir, por lo que el pronunciamiento es firme.
Los problemas legales no han sido los únicos frentes con los que ha tenido que lidiar Morato al frente de Deliveroo. También ha tenido que gestionar la dura competencia contra Glovo o UberEats, que se quedaron entre otros con el contrato de entrega de comida del gigante McDonald´s, la dificultad para captar talento más 'senior' para el equipo local o el crecimiento de las 'supercocinas' de su servicio Editions, según explican fuentes de este mercado.
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