Nuevo varapalo de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia al ministro de Energía Álvaro Nadal. El pleno del organismo aprobó ayer un informe sobre el borrador de decreto elaborado por el ministerio para controlar el cierre de centrales eléctricas. El informe asegura que el decreto introduce inseguridad jurídica, supone una excesiva discrecionalidad del Ejecutivo, se ha elaborado con precipitación e introduce mecanismos para mantener las centrales abiertas que pueden ser ayudas de Estado.
El informe de la Comisión, preceptivo aunque no vinculante, es una crítica, punto por punto a los planes de Nadal para mantener operativas centrales -como las de carbón- a pesar de que sus propietarios, las eléctricas, abogan por el cierre. No sólo se trata del carbón. El decreto también afecta a las nucleares.
Una vez conocido el informe, fuentes del Ministerio de Energía explicaron que el Gobierno intentó abordar el cierre de centrales en una norma de rango más elevado que el decreto, pero no pudo ser por falta de apoyo en el Congreso, especialmente del PSOE. Las mismas fuentes señalaron que el decreto tiene que pasar aún por el Consejo de Estado y no hay decisión tomada sobre si se mantendrá o se modificará.
A la CNMC no le ha convenido ni uno solo de los argumentos del Ministerio de Energía. Por el contrario, acepta buena parte de las alegaciones empresariales. Así por ejemplo, señala que el sistema español tiene un exceso de capacidad y podría prescindir de una parte importante de sus centrales de carbón.
Al Consejo de Estado
Con el decreto, que tendrá que pasar ahora a examen del Consejo de Estado, el Ministerio de Energía extiende las causas por las que el Gobierno puede intervenir en el mercado de energía: no sólo por cuestiones de seguridad en el suministro como prevé la Ley del Sector Eléctrico, sino también por cuestiones económicas de interés general como el impacto sobre el precio de la luz o por cuestiones medioambientales.
El comunicado de la CNMC es una crítica a la totalidad. "La CNMC considera que los nuevos criterios que plantea el MINETAD (Ministerio) en su Proyecto de Real Decreto no están suficientemente desarrollados ni previstos en la normativa vigente. Además, le confieren un excesivo margen de discrecionalidad y estima que crean inseguridad jurídica para las nuevas inversiones, pudiendo resultar contraproducentes para la competencia en el sector eléctrico".
Nada se salva. En opinión de la CNMC, las medidas diseñadas por Nadal "podrían ir en contra de la normativa europea" recogida en la Propuesta de la Comisión Europea de Reglamento relativo al mercado interior planteado en el Paquete de Invierno (Winter Package). No sólo eso, sino que los mecanismos concretos para mantener centrales abiertas -subastas- son complejos y poco meditados ya que, si como pretende el ministerio, se compensara a un tercero por mantener una central si la subasta queda desierta "sería una ayuda de Estado".
Seguridad de suministro
Competencia tampoco se cree que cerrar centrales sea tan grave. La CNMC recuerda en este sentido "que el sistema eléctrico español no presenta problemas de seguridad de suministro en el medio y largo plazo sino todo lo contario". En el peor escenario, señala, con una punta de demanda de 46.000 MW y baja generación, se podría prescindir sin riesgo de una parte significativa del parque de carbón existente.
La conclusión de la CNMC sobre la calidad de los planes de Nadal es también muy dura: demasiada precipitación, asegura. Lo dice en su comunicado. "El exceso de capacidad" asegura " debería analizarse sin precipitación y teniendo en cuenta que los consumidores españoles, desde la liberación del sector eléctrico, han sufragado importantes pagos por la disponibilidad de centrales y otros conceptos".
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