La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha requerido a MásMovil para que le amplíe las explicaciones incluidas en su información financiera de 2017 y del primer trimestre de 2018. Un periodo en el que incluyó el programa de 'stock options' con el que va a hacer de oro al equipo liderado por Meinrad Spenger.
La operadora comunicó en marzo, en pleno despegue bursátil de sus títulos (llegó a alcanzar los 127 euros por acción, cuando ahora está en 93,5), que planeaba un bonus millonario para 2020. Lo cierto es que MásMovil no hace un desglose significativamente diferente al que realizó la pasada primavera. Su idea es abonar 1,7 millones de derechos, lo que conllevará un desembolso estimado de 41,3 millones de euros y del que ya ha provisionado 9,4 millones. Un plan que, según aprobó en la junta del pasado año, podría llegar a beneficiar a toda la plantilla.
MásMovil indica a la CNMV que el valor razonable medio ponderado, sin considerar las condiciones de desempeño, es de 35,56 euros por derecho; y reitera que la valoración final del plan dependerá de cómo evolucione la acción de la operadora en las 90 sesiones anteriores a su ejecución, con una volatilidad esperada del 30%. Al actual nivel de la cotización, la ejecución del plan implicaría plusvalías notables.
También reitera que las únicas condiciones que se han marcado para su cobro pasan por "la permanencia del beneficiado en el grupo durante la duración del plan, la evolución de determinadas variables operativas y el cumplimiento de determinados objetivos individualizados por beneficiado", sin especificar más detalles. Curiosamente, el bonus llegará en el momento en el que MásMovil empezará a frenar su crecimiento.
Frenará su crecimiento
La firma acaba de cerrar una primera mitad del año dorada. No sólo ha vuelto a beneficios, ha ganado 38,3 millones de euros entre enero y junio (hace un año perdía más de 151 millones), sino que también ha hecho despegar sus ingresos un 11%. En concreto, su volumen de negocio ha alcanzado los 676 millones en medio año. Pero esta época de 'vino y rosas' en cuanto a su crecimiento no va a durar para siempre.
La operadora reconoce que, a partir de 2021 alcanzará "la madurez en el mercado" y crecerá más despacio, explica a la CNMV. La compañía encabezada por Meinrad Spenger explica que ralentizará su evolución en 2021 "como consecuencia de la finalización del plan de ampliación de la red propia" y, también, de la red sobre la que tiene derecho de uso gracias a los acuerdos que mantiene con otros operadores. Por ello, de cara a los próximos cuatro años reconoce que prevé "una proyección de incrementos de ingresos media del 7%, con picos del 12% en el año 2019 y un crecimiento del 2% en el año 2022".
En cuanto a qué va a pasar en este 2018, gracias a las ofertas convergentes, su propia inversión, los acuerdos que tiene que con otros operadores y las refinanciaciones llevadas a cabo para acometer esos planes de expansión, proyecta un avance de sus ventas del 9%.
Y también detalla cómo va a frenar sus inversiones. Para este 2018 tiene previsto destinar 450 millones de euros, sobre todo en el despliegue de la red, que se rebajarán a 254 millones el próximo 2019. Con esos avances de red propia y ajena (con los acuerdos que mantiene) prevé llegar a una cobertura de 8 millones de unidades inmobiliarias. Y, a partir de 2020, bajará el pistón. Desde entonces, "se consideran inversiones con un valor medio de 164 millones de euros".
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