La Fundación Carulla sale al rescate del Ara con una aportación de 500.000 euros

  • El medio catalán con tintes independentistas acumula pérdidas por valor de 10,6 millones pese a los 4,8 millones de publicidad del Govern desde 2010.
Hacienda investiga Agrolimen, el imperio de la familia Carulla, en plena crisis independentista
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El diario Ara ha sido desde su creación en el año 2010 uno de los medios referencia del independentismo. Nació al albor de las las elecciones al Parlamento catalán del año 2010 de las que salió vencedor Artur Mas y fue impulsado por Oriol Soler, Fernando Rodés Vilà, Víctor Font y la Fundación Carulla. Desde entonces ha sido regado con casi 5 millones de euros en concepto de publicidad institucional, pero sus principales socios tuvieron que salir a su rescate en 2016 debido a la complicada situación económica en la que el medio continúa sumido.

En estos seis años, Artur Más y Carles Puigdemont han disparado el gasto en publicidad institucional con motivo de su clara pujanza secesionista. Esto le ha servido al Ara para ser uno de los medios más regados económicamente por parte del Govern, solo por detrás de otros como Punt Avui, La Vanguardia o Rac1. 'Amb el suport de la Generalitat de Catalunya', como ha rezado en la parte inferior de su diario digital durante años.

A pesar de ello, el diario Ara ha vivido en una continua crisis económica y en sus seis primeros años de vida perdió 10,6 millones de euros. El año 2016 no fue diferente y el medio presidido por Ferrán Rodés se dejó 554.947 euros, según las cuentas remitidas al Registro Mercantil.

En la memoria anual se detalla que las eventualidades económicas del último cuatrimestre obligó a precisar “aportaciones por parte de los socios inversores en forma de préstamos por un total de 750.000 euros". Según la compañía, esto "consolida el apoyo financiero de los socios inversores" y seguir adelante "con el Plan de Negocio que prevé beneficios en un futuro próximo".

Y la Fundación Carulla, de la familia de Agrolimen-Gallina Blanca, fue la que salió al rescate del Ara al conceder un préstamo de 500.00 euros. El diario arrastra con la Fundación una deuda anterior de casi 2 millones de euros de un préstamo participativo y de un préstamo puente, ambos del año 2014.

La cantidad restante, 250.000 euros, la aportó Fernando Rodés a través de su sociedad Acta Diurna. Ara también adeuda a esta sociedad más de 1,5 millones de euros un préstamo participativo y dos préstamos puente. Hay que recordar que durante todos estos años, los accionistas han cubierto el déficit mediante siete ampliaciones de capital. La deuda del grupo a largo plazo es de 9,5 millones de euros sumando otras entidades del grupo, bancos y administración pública. 

 

4,8 millones por publicidad del Govern

La línea independentista le ha servido al Ara para recibir subvenciones millonarias año tras año. Los ‘regalos’ del Govern comenzaron con su creación en 2010 y ya le obsequiaron con casi 1 millón de euros para su lanzamiento. Desde aquella fecha hasta 2015, le regó con otros 2,3 millones de euros.

La memoria sobre publicidad institucional del Govern detalla que el Ara recibió la cifra récord de 1,5 millones de euros en 2016. Es decir, que en total son ya 4,8 millones de euros desde su creación. A pesar de ello, los impuestos cargados a todos los catalanes no impiden que la editora salga de los números rojos en ningún ejercicio.

Los años más duros fueron 2011 y 2012, cuando el diario Ara perdió 3,5 y 2,3 millones de euros respectivamente. Números rojos que se han ido reduciendo considerablemente desde que en 2012 pusieran en marcha un plan de reducción de pérdidas que, por ahora, ha ido cumpliéndose.

La Sociedad prevé entrar en beneficios a finales de 2018 si se dan tres condicionantes: “El incremento de los ingresos de suscripciones y de la publicidad convencional [...] siempre que la venta de ejemplares no caiga un 6%”. El dato positivo para el diario Ara es que la facturación ha ido creciendo año a año. En 2016 alcanzó 12,9 millones de euros sumando Cataluña, Andorra, Baleares y Valencia.

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