La inversión en ladrillo va camino de cerrar un buen año y apunta maneras de cara al próximo ejercicio. En sus previsiones de diciembre, el Banco de España eleva casi en un punto el aumento de la inversión en construcción este ejercicio hasta el 4,5%. Además prevé una mejora de este componente del PIB de otras dos décimas adicionales (hasta el 4,7%) el próximo ejercicio. Pese a este fuerte repunte los expertos descartan el peligro de una nueva burbuja en el corto y medio plazo.
Justo antes de que estallase esa burbuja en 2007, la inversión en vivienda aumentaba en nuestro país a tasas del 6% y superiores. En ese momento, en plena especulación, la rentabilidad que ofrecían los inmuebles rondaba el 12% o 13%. Hoy día, la inversión avanza en torno al 4% y, dependiendo de las zonas la subida de precios ronda el 6% o el 8% en las zonas más demandadas, como las grandes ciudades, Baleares y Canarias, pero sigue siendo negativa en otras áreas del país.
José García Montalvo, catedrático de Economía de la Universidad Pompeu i Fabra pronostica que un aumento de la inversión "mucho mayor" del previsto inicialmente éste y el próximo año, sobre todo si tenemos en cuenta los anuncios de nuevas promociones que han venido realizando recientemente socimis y empresas constructoras.
No obstante, recuerda que ahora vivimos una "situación extraña" donde el porcentaje de vivienda nueva sobre el total de los inmuebles vendidos apenas se sitúa entre el 9 y el 10% y "eso no es normal", sentencia.
Hasta ahora el mercado se ha recuperado gracias al volumen de transacciones de vivienda de segunda mano y ahora empieza a verse cómo la inversión total va tirando con fuerza con la obra nueva. Sin embargo y desde su punto de vista, "no es factible llegar a corto plazo" a entre un 50% y un 55% de vivienda nueva sobre el total de operaciones, como sucedía hace diez años.
Un ajuste de los precios del 39% desde máximos
De acuerdo con los datos que maneja Tinsa, la principal tasadora de nuestro país, el previo de la vivienda se ha reducido de media un 39% desde los máximos que alcanzó en 2007, justo antes de estallar la burbuja. Las zonas donde más ha caído el desde entonces son la costa mediterránea (-48%) y las áreas metropolitanas (-43%). En el caso de las capitales y grandes ciudades el ajuste desde máximos es del 41%.
En su último informe Situación España, BBVA Research eleva en 1,7 puntos la previsión de crecimiento de la inversión en vivienda hasta el 8,2% este año. Sin embargo y a consecuencia de las tensiones políticas catalanas ha revisado a la baja en medio punto su nivel de cara a 2018, hasta el 5,9%.
En la entidad inciden en que el mercado inmobiliario "sigue mostrando una tendencia positiva", que se plasma en el "buen tono" de la demanda y en los aumentos del precio de la vivienda. A ello se suma el "dinamismo creciente" de las operaciones de compraventa de suelo que, previsiblemente, se convertirán en nuevos desarrollos durante los próximos trimestres.
De momento, las Administraciones Públicas están aprovechando estos vientos de cola en forma de un aumento de la recaudación. El auge del ladrillo ha disparado un 45% los ingresos por Transmisiones Patrimoniales en las comunidades autónomas en apenas tres años, hasta los 5.312 millones. En los tres últimos meses, el aumento de compraventas en la vivienda nueva es mayor que en la segunda mano, poniendo fin de momento a una tendencia que se ha mantenido a lo largo de la crisis.
Con los datos de octubre que facilita el Instituto Nacional de Estadística (INE), las compraventas de inmuebles encadenan ya medio año consecutivo al alza y, además, su avance ha sido casi 15 puntos superior al del mes de septiembre (11% de subida).
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