¿Qué tienen en común un iPhone y una cámara de fotos Polaroid? A primera vista nada. Sin embrago, la historia de estos dos gadgets les une más de lo que pueda parecer. En junio de 2007 Steve Jobs revolucionaba el mundo de la tecnología de la mano del primer iPhone, un dispositivo que le daba la última estocada a la famosa cámara. Ahora, 10 años después, smartphones como el de Apple han ayudado a que la mítica Polaroid viva una segunda edad de oro.
La historia de la marca comenzó de la mano de las gafas polarizadas. El científico Edwin Herbert Land registró varias patentes que le llevaron hasta la primera cámara fotográfica con revelado instantáneo en 1947. Desde ese momento, Polaroid se convirtió en todo un referente e influyente en los diferentes avances en el sector, tanto desde sus inicios como ahora en la actualidad. Tal es su influencia que Instagram decidió usar su imagen para su logotipo en 2010.
La primera cámara fotográfica fue la Land Camera Model 95 y salió a la venta por 89,75 dólares, un precio desorbitado para la época pero que no impidió que los 60 modelos se agotaran el mismo día de sus presentación. En los años 70, la demanda de este dispositivo era tal que la compañía llegó a producir 5.000 cámaras al día y 50.000 paquetes de película para las SX-70. En los 80, las películas 600 Film le dieron otro empujón. Se produjeron tantos modelos diferentes de las cámaras Polaroid 600, que incluso Barbie, el Monstruo de Tasmania o las Spice Girls tuvieron la propia, para el disfrute de los niños de los 90.
En 2007-2008 la marca vivió uno de sus peores momentos. La empresa que pertenecía desde 2005 a Petters Group Worldwide, un grupo que fue fundado por Tom Petters, fue investigada por fraude. Las autoridades consideraban que Tom Petters era el autor de un fraude de 3.200 millones de euros. Unos meses después la empresa anunciaba la bancarrota.
Los problemas económicos se unieron al nuevo paradigma de la telefonía móvil. Los nuevos modelos empujados por marcas como Apple o Motorola relegaban a la famosa cámara a un segundo lugar. En esta época, la compañía tuvo que subastar la colección de fotografías de Edwin Herbert Land para pagar su deuda que ascendía a los 1.000 millones de dólares.
Unos meses después, la empresa Impossible Project acudió al rescate de Polaroid. Su objetivo era volver a lanzar película instantánea. Contra todo pronóstico lo consiguieron comprando maquinaria de la empresa que se acababa de desmantelar en Holanda. Impossible Project consiguió que más de un amante de la fotografía desempolvara sus antiguas Polaroid ya que el papel era compatible con las marcas antiguas.
El auge de la moda retro ha sido clave para estas cámaras. Según datos de idealo, la demanda de Polaroids aumentó un 54% entre junio de 2015 y junio de 2016. Esta tendencia se ha ido consolidando en los últimos dos años con el lanzamiento de nuevos modelos y las versiones de dispositivos de los 80 y 90. Puede que muchos de los millennials no hayan visto nunca una Polaroid, pero no les ha hecho falta gracias a las redes sociales. Al final, todas las modas vuelven.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios