Las sociedades cotizadas españolas lograron unos ingresos en el extranjero cercanos a 350.000 millones de euros, cantidad que representa el 67% de su facturación total, de acuerdo con un estudio difundido hoy por Bolsas y Mercados Españoles (BME).
En el informe del Servicio de Estudios de BME se concluye que este dato muestra una "mayor fortaleza" de las fuentes de ingresos de las sociedades cotizadas por el "aumento de la diversificación geográfica de sus ventas" y añade que el 71% de estas compañías aumentaron el año pasado su facturación.
Así, el documento indica que la cifra neta de negocio de estas compañías se elevó a 520.751 millones el año pasado, un 6,14% más, apoyada principalmente en la facturación procedente del exterior. Además, considera "significativo el aumento de la facturación en España -aquí ingresaron 171.400 millones-, del 3%, que recoge la mejora de la situación económica que apuntan los principales indicadores de actividad nacionales".
El impulso del negocio exterior de las empresas cotizadas en 2017 ha estado liderado por las sociedades que componen el Ibex 35, que han incrementado el 8,5% su facturación exterior. Sin embargo, fueron las empresas pertenecientes al Ibex Medium Cap las que mayor volumen agregado de ingresos obtuvieron fuera de España el año pasado, un 69% del total, seguidas de las del Ibex 35, con un 67,6% y las que forman parte del Ibex Small Cap, con 53,9%.
El informe indica que "el fuerte carácter internacional de la gran mayoría de las empresas cotizadas es un rasgo diferencial del impulso de tamaño y la expansión que se promueven en la vida de las empresas por las propias exigencias competitivas y de transparencia que impone la pertenencia a un mercado de valores".
Otra de las conclusiones del estudio refiere la mejora de la "solvencia" de las compañías cotizadas y el refuerzo de su estructura financiera por "la reducción generalizada de sus niveles de endeudamiento" por la reducción de su endeudamiento, sobre todo entre las entidades no financieras.
Como ejemplo, señala que la reducción de la deuda financiera neta de las empresas no financieras del Ibex 35 el año pasado se elevó a 8.000 millones, hasta 180.217 millones. Así, la deuda financiera total se redujo hasta el 33,82% de su activo, 10 puntos menos que en 2007.
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