Sector legal

Los bufetes de abogados ponen a punto sus direcciones ante el cambio de ciclo

Hasta nueve despachos nacionales han revisado sus cúpulas en el último año, algunos designando a un nuevo responsable y otros, ratificando al actual.

Tráfico en la carretera A-1, a 8 de diciembre de 2021, en Madrid, (España). La Operación Retorno de este Puente de la Constitución ha estado marcada por la mala situación meteorológica debido a la entrada de la borrasca Barra. La Dirección General de Tráfico había previsto más de 8 millones de desplazamientos de largo recorrido por carretera para estos días. Un incremento del 1,05% con respecto a los datos reales de 2019. 08 DICIEMBRE 2021;OPERACION RETORNO;DGT;COCHES;TRAFICO Alberto Ortega / Europa Press 08/12/2021
Los despachos afrontan un relevo generacional obligado y cambios en el negocio.
Europa Press

Desde que la primera ficha se puso en movimiento, el efecto dominó ha ido cobrando más fuerza. El sector legal español atraviesa por un periodo de transición histórico, con algunos de los principales operadores de la abogacía de los negocios revisando sus organigramas, o en proceso de hacerlo, al más alto nivel. Durante el último año, nueve despachos de referencia, nacionales e internacionales, han designado a un nuevo socio director o revalidado en el cargo a la persona al frente de la organización. Ello en medio de innumerables movimientos de entradas y salidas de profesionales, dando lugar a uno de los años más activos en materia de fichajes que se recuerdan.

Sin ir más lejos, hasta tres bufetes han planteado esta misma semana decisiones que afectan directamente a sus cúpulas y, por ende, a su rumbo. Tal y como reveló La Información, EY ha optado por dar galones a Lourdes Centeno, una de sus profesionales más destacadas, para que asuma la gestión de la parte legal. La promoción de la ex vicepresidenta de la CNMV como nueva responsable de la división de abogados de la Big Four, integrada por 150 profesionales, va acompañada de un rediseño de la dirección, cuya responsabilidad pasará a recaer sobre cinco socios, con Centeno a la cabeza.

A los dos días, prácticamente sin solución de continuidad, el británico Simmons & Simmons daba a conocer que Eduardo Peñacoba pasa a ser el nuevo director de su oficina en España. Lo hace en sustitución de Andrés Mochales, quien cede las riendas de la firma después de 15 años, y como un reconocimiento directo de Londres a su labor en el ejercicio del derecho laboral, toda vez que no es habitual encontrar a especialistas de esta práctica al frente de despachos multidisciplinares. Además de Peñacoba, el actual responsable de restructuraciones e insolvencias, Santiago Hurtado, ha sido designado responsable nacional de la práctica de procesal y arbitraje en nuestro país.

Gómez-Acebo y Deloitte Legal contarán con nuevos responsables este año

Suma y sigue, ya que Dentons, otro despacho internacional, bendecía esta misma semana la hoja de ruta planteada por Javier Badiola como responsable de la filial española renovando su mandato por tres años. Todo después de que el letrado asumiera la gestión de la firma en el verano de 2020, tras la marcha inesperada de Jesús Varela, por entonces socio director de Dentons España, hacia Pérez-Llorca junto a su equipo. Un momento de catarsis que llevó a Badiola a replantear el rumbo de la firma y que se saldó, a los pocos meses, con la salida de socios históricos como José María Buxeda,  Javier Lasa y Juan Ignacio Alonso Dregi.

No obstante, la primera gota de este fenómeno en cascada cayó en marzo de 2021, con la elección de José Giménez como nuevo socio director de la oficina de Linklaters en Madrid. Asumió el cargo en mayo, recogiendo el testigo de un Íñigo Berrícano que daba un paso al lado tras 10 años al frente de la firma. La designación de Giménez, abogado del Estado en excedencia y socio responsable de la práctica de Derecho Público y Sectores Regulados, respondía al interés del bufete del 'magic circle' inglés, con una presencia muy fuerte en el mercado de operaciones, por situar en el centro de su actividad otras áreas.

Más desapercibido, pero igual de relevante, pasó el nombramiento de José Luis Vázquez como nuevo socio director de Hogan Lovells de Madrid el pasado verano. El responsable del área de Corporate & Finance aceptaba el encargo de dirigir la oficina de la capital en sustitución de Lucas Osorio, que continúa vinculado como socio del área de Corporate M&A.

En la recta final de 2021 se conocieron varias noticias, como que Jaime Velázquez seguiría al frente de Clifford Chance en España tras ser renovado una segunda vez. En noviembre se produjo el desembarco de Teresa Zueco como máxima responsable de Squire Patton Boggs, procedente de DLA Piper, mientras que Álvaro Iza asumía el bastón de mando en Freshfields Bruckhaus Deringer, sucediendo en el puesto a David Franco, quien previamente ha desempeñado este cargo durante siete años.

Nuevos relevos a la vista y factores de cambio

Teniendo en cuenta todo lo anterior, la composición del sector no puede darse todavía por cerrada, puesto que se esperan más movimientos de cara a 2022. Por el momento, hay dos que se dan por seguros. El primero es la designación de un nuevo socio director en Gómez-Acebo & Pombo donde, como ya contó La Información, los planes para suceder a Carlos Rueda están más que encauzados. En este sentido, Íñigo Erláiz es el candidato que, como socio coordinador del departamento de Mercantil y Capital Riesgo, suma más enteros para liderar al despacho en esta nueva etapa. Tanto por méritos propios como por su estatus dentro de la organización.

El segundo afecta a Deloitte Legal, que el próximo mes de junio hará efectivo el relevo en la dirección. Nicolás de Gaviria, socio de Fiscal de la firma, sucederá a Luis Fernando Guerra, en el marco del amplio proceso de reestructuración acometido meses atrás en el seno de la 'big four', con nuevos nombres al frente de otras áreas de negocio y prejubilaciones en el comité ejecutivo.

Aunque no se puede establecer un denominador común que explique este fenómeno, en el sector se comparte la tesis de que los retoques en las cúpulas responden a una intención general. Esta es anticiparse a un cambio de ciclo cuya llegada ya está poniendo a prueba las costuras de los despachos. Ya sea de cara a preparar el obligado relevo generacional, que implica renovar sociaturas, cuando no consejos de administración; o por el empuje de una incesante actividad económica que reclama un nuevo enfoque de negocio, espoleado por la digitalización y la reducción de honorarios.

En este sentido, la propia pandemia ha dado un impulso inesperado a áreas jurídicas consideradas "complementarias" hasta hace poco. Hablamos de prácticas como laboral, reestructuraciones o Derecho Público, que durante mucho tiempo han permanecido a la sobra de M&A o Fiscal, por ejemplo. Sin embargo, la realidad es que se han convertido en el motor productivo de algunos despachos. "Si han ganado peso lo lógico es que su relevancia en la toma de decisiones sea mayor", apuntan fuentes del sector.

Con todo, la transición en la dirección ejecutiva de las estructuras legales siempre son delicadas, incluso cuando reina el consenso. Tal y como explica Miguel Ángel Pérez de la Manga, socio de la consultora BlackSwan, la figura del socio director en firmas de abogados es la de un 'primus inter pares'. "Es un curioso caso de delegación ascendente. Los socios, que son los propietarios de la firma y a la vez los que aportan negocio y trabajo, delegan en uno de ellos la gestión de la firma". Esta necesidad de equilibrar un consenso previo durante el proceso con la cohesión entre los socios hace la toma de decisiones suela ser lenta. 

Mostrar comentarios