El beneficio neto del gigante de lujo LVMH fue de 522 millones de euros entre enero y junio, una caída del 84% respecto al mismo período del año anterior, debido al descenso de las ventas por el coronavirus, informó la empresa este lunes en sus resultado semestrales.
Las ventas del grupo cedieron en total un 27%, hasta los 18.393 millones de euros, un impacto que se apreció en todo el mundo, aunque logró remontar en China en el segundo trimestre. La crisis puso en evidencia además una fuerte aceleración en la venta por internet que compensó el cierre de tiendas, que en algunos casos duró meses.
La deuda financiera neta del grupo es de 8.230 millones de euros, un 5% inferior a la del año anterior, y el resultado operativo corriente en el semestre fue de 1.671 millones de euros, un 68% menos. Todos los sectores del grupo se vieron afectados por la caída en las ventas: vinos y espirituosos recularon un 29%, moda y marroquinería un 24%, cosmética un 29%, y relojería y joyería un 39%.
En sus perspectivas para el resto del año, el grupo mantiene una estrategia basada en preservar el valor de sus marcas apoyándose en la calidad, pero en el contexto de la crisis sanitaria y económica, LVMH asegura que reforzará el control de gastos y mantendrá una política "selectiva" en sus inversiones.
"El impacto de la epidemia sobre las ventas y los resultados anuales no puede ser evaluado con precisión en este momento, sin conocer el calendario de regreso a la normalidad en las distintas zonas de implantación del grupo", apunta el comunicado. Tras un segundo trimestre "muy afectado", esperan una recuperación "gradual" a lo largo del segundo semestre de 2020.
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