El primer golpe de la Covid-19 impactó de lleno a Másmóvil, cuarto operador que vive de ganar clientes de sus grandes rivales. Tras ese impacto, la compañía dirigida por Meinrad Spenger ha mejorado los números. Entre julio y septiembre, los ingresos por servicio han subido un 23%, cinco puntos porcentuales más que en primavera y dos más que en el mismo periodo del año anterior. La rentabilidad también ha mejorado.
En concreto, en el tercer trimestre sumó un total de 454 millones de euros de estos ingresos por servicio, lo que supone un incremento del 23% -en 2019 esa tasa fue del 21%-. En los nueve primeros meses, ese crecimiento es del 20% (1.271 millones de euros), debido al golpe del coronavirus, según los datos que ha hecho públicos este lunes la empresa, ya fuera de la cotización en la bolsa española tras la venta a los fondos Providence, KKR y Cinven.
¿Cómo han evolucionado los ingresos totales? Los ingresos por servicio proceden principalmente de la venta de conectividad a clientes residenciales y empresas. La empresa no facilita en esta comunicación su facturación total, donde se incluye lo logrado por distribución de teléfonos móviles y otros productos menores. Hay que tener en cuenta que en el segundo trimestre del año las ventas totales 'sólo' crecieron un 10% -frente al 21% de un año antes- por la caída de la venta de móviles y de otros negocios 'menores'.
Por tanto, el crecimiento de los ingresos por servicios, se ha recuperado. Y en el lado de la rentabilidad, el tercer trimestre se cierra con un resultado bruto de explotación (Ebitda) de 152 millones de euros, un 27% más. En los nueve primeros meses, ha subido en la misma proporción hasta los 428 millones.
En plena guerra comercial, especialmente acuciante en el segmento low cost -donde el cuarto operador está más enfocado-, ha sumado 100.000 altas netas de banda ancha durante el tercer trimestre (1,8 millones en total). No precisa cuántas durante este periodo se añadieron en móvil. A cierre de septiembre contaban con 9,5 millones de líneas -de las que 3,2 millones eran de prepago-.
El reto de mantener el crecimiento
La empresa tiene ahora por delante el reto de mantener pisado el acelerador a fondo en un mercado especialmente competido como el español. PwC le asestó un 'tijeretazo' a las previsiones de crecimiento de la operadora en el informe que se elaboró para determinar si la valoración de la compañía -3.000 millones sin contar la deuda financiera- que hicieron los tres fondos de la OPA era correcta. En concreto, la auditora dibujaba un horizonte en e que el volumen de las ventas entre las cinco marcas del grupo crecerá a una tasa media del 5% anual hasta el año 2025, muy lejos de lo logrado en los últimos tres ejercicios.
Estos son los primeros resultados empresariales que el grupo presenta después de que los tres fondos de capital riesgo hayan comprado el 100% de las acciones y la hayan excluido de la bolsa. Hoy la compañía ya es una empresa privada, que no tendrá la presión de los analistas y de la cotización.
