Microsoft se une a la polémica: escucha las conversaciones de Skype y Cortana

4. MICROSOFT
4. MICROSOFT
Wikimedia Commons/Johannes Hemmerlein

La polémica de las escuchas de los asistentes virtuales salpica ahora a Microsoft. El gigante tecnológico estadounidense ha reconocido este jueves que actualmente escucha algunas de las conversaciones de sus usuarios de Skype y de Cortana. La compañía fundada por el magnate Bill Gates justifica se escuda en que únicamente hace estas escuchas para refinar las funciones digitales de traducción de voz que ofrecen estos dos servicios, sin embargo, la controversia está sobre la mesa.

Según la prensa francesa, que recoge las afirmaciones de la agencia Agence France Presse (AFP), la 'teleco' estadounidense "recopila datos de voz" de los usuarios de Skype y Cortana para "mejorar los servicios de búsqueda, comando de voz, dictado y traducción". En estas escuchas, según AFP, se garantiza la aprobación del cliente antes de que se recopilen y se escuchen sus datos de voz.

En este sentido, Microsoft se defiende de las revelaciones que el medio digital Vice publicó el pasado miércoles. Según aseguraba el medio, las conversaciones que los proveedores del gigante tecnológico escuchaban en Skype podrían tocar temas íntimos como el sexo o la pérdida de peso.

La compañía fundada por Bill Gates reitera su apoyo a la privacidad y la seguridad alegando que elimina la información acerca de la identidad del usuario antes de que éstas conversaciones sean compartidas con sus proveedores. Añade además que estos proveedores respetan también esta protección de la intimidad y la privacidad, tal y como establece la legislación europea.

Microsoft se une así a la lista de grandes compañías que realizan polémicas escuchas a sus usuarios. El pasado mes de mayo, Amazon anunció que incorporará a su asistente virtual, Alexa, la función de eliminar por completo las grabaciones que realiza y que oculte la cámara que tiene.

El buscador 'online' por excelencia, Google, también se vio inmerso en la polémica. La prensa belga aseguraba a principios de julio que el asistente virtual grababa charlas en la cama, llamadas de trabajo y escenas de discusión, sexo o violencia. La compañía suspendió su actividad en toda la Unión europea por tres meses tras una solicitud de la Agencia de Protección de Datos de Alemania, según la prensa francesa.

Mostrar comentarios