En enero de 2018 el Juzgado Contencioso-Administrativo nº 5 de Madrid anuló provisionalmente la licencia de obra de 80 nuevas viviendas en La Moraleja, situadas a un paso de la R-2 y en el desarrollo natural de esta urbanización de Alcobendas (Madrid), en una zona conocida como La Carrascosa A. Según la sentencia del juez, la licencia de obra mayor concedida a la empresa Sociedad Universal de Negocios e Inversiones S.A. para la construcción de 80 chalets en la calle Camino Ancho nº 2, en una promoción que lleva este nombre, quedó anulada.
Año y medio después los llamados chalets 'low cost' de La Moraleja-por costar menos de un millón de euros- siguen adelante sin sus papeles en regla, la mayoría están vendidos, la licencia municipal sigue sin asomar y, además, hay cambio de gobierno: del popular Ignacio García de Vinuesa al socialista Ramón Sánchez Acera, cuyo grupo se ha opuesto tradicionalmente a este desarrollo. Detrás de los inmuebles hay un anónimo mexicano llamado Miguel Ángel Ruiz Hernández, que acaba de inyectar un millón de euros en otra sociedad constructora enfocada también en la zona: Moralia Espacio Futuro S.L.
Lo cierto es que Camino Ancho 2 sigue su construcción, como hemos podido corroborar. Este medio se ha puesto en contacto con el nuevo equipo municipal del Ayuntamiento de Alcobendas para recabar su opinión sobre la concesión de licencias a esta promoción sin éxito. Curiosamente, el accionariado de la empresa Moralia Espacio Futuro comparte algunos nombres con Sociedad Universal de Negocios e Inversiones S.A, además del de Miguel Ángel Ruiz Hernández, que también ha elegido La Moraleja como su lugar de residencia habitual.
Se trata del abogado burgalés Elías Val Muga. Ni rastro en esta empresa de Carlos Cutillas, que fue la persona por la que Ruiz Hernández conoció la existencia de estos terrenos. Cutillas está asociado con la extinta Inmobiliaria Chamartín y fue uno de los inversores fallidos en un negocio vitícola con Emilio Aragón. En Moralia Espacio Futuro sí aparecen familiares de la saga repostera Martínez.
La lucha de los vecinos de La Moraleja contra la decisión de urbanizar la zona colea desde hace meses. Una batalla liderada la Entidad de la Conservación de La Moraleja. Aunque en el trasfondo de estas cuitas no están solo los 80 chalets del inversor mexicano. Y tampoco de Pryconsa y Aquila Capital, que también tienen chalets en esta zona con el mismo problema: un total de 200 inmuebles. El verdadero problema está en los llamados pisos baratos que se van a construir en la zona. El escollo está en los cerca de 500 pisos proyectados en la zona cuyo nombre es Carrascosa B.
El anterior consistorio del Partido Popular había puesto en marcha un plan para legalizar La Carrascosa A y B, ya que el plan contenía errores relacionados con el impacto medioambiental que este desarrollo implica en su entorno. En el nuevo plan han participado activamente los propietarias de los terrenos.
La anterior corporación ya detalló a importancia de que Fomento les dejase "pinchar con la R-2", que queda a menos de 150 metros de La Carrascosa. "De momento hay poca voluntad política en el Gobierno de Pedro Sánchez, pero seguiremos insistiendo", manifestaron en el pasado mes de marzo este medio.
Lo que es cierto es que a día de hoy el nuevo consistorio socialista de Alcobendas no se ha pronunciado sobre qué hará con este desarrollo urbanístico, que sus promotores están a meses de terminar. Y entregar. Según ha podido saber este medio la mayoría de las viviendas 'ilegales' de Camino Ancho 2 tienen ya dueño. Este desarrollo urbanístico, junto con Los Carriles, que tiene en su mano la mayor bolsa de suelo público del norte de Madrid, son los dos grandes retos del nuevo consistorio.
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