Moreno Carretero, uno de los accionistas de referencia de la constructora Sacyr, ha confirmado esta mañana a través de un vídeo entrevista que tiene previsto aumentar sus posiciones en la empresa. Actualmente, cuenta con un 12,2% de la compañía y, según sus declaraciones, aumentará su participación. "A medida que vayan vendiendo los 'Collar' iré aumentando el número de acciones en Iberclear y pediré los consejeros que correspondan", ha afirmado.
Del mismo modo, ha afirmado que es necesario una división del mando de la compañía,ya que ve "obvio" que una persona de 65 años, Manuel Manrique, no pueda llevar solo una empresa. Por ello, quiere crear la figura de un Consejero Delegado que le ayude en la gestión.
"Le he apoyado a muerte en los años duros que hemos tenido. Han sido años dificilísimos desde el punto de vista financiero. Lo hemos pasado muy mal. Ha tenido todo mi apoyo y tengo que felicitarle. Se ha hecho una labor fantástica en la eliminación de un pasivo enorme", ha afirmado Moreno Carretero.
"Hoy en día estamos saneados completamente y sólo tengo para Manolo enhorabuenas", ha insistido el empresario. En cambio, ha continuado diciendo: "Si tuviera 40 pudiera ser, pero con 65 me parece que lo lógico es que las funciones se desdoblen, incluso que ya estuvieran desdobladas desde hace años".
"Oye Manuel, nombra a un consejero delegado, búscalo en el mercado, potencia el sector de la construcción y tira para adelante", le ha instado. Esta y otras propuestas serán debatidas en la junta de la compañía que se celebrará el próximo jueves.
Esta reunión de la compañía también votará dos ampliaciones de capital de 18 millones de euros cada una con el fin de pagar los dividendos flexibles. La ampliación se llevaría a cabo mediante la emisión de nuevas acciones ordinarias de un euro de valor nominal cada una, sin prima de emisión para hacer frente al pago de estos dividendos.
Moreno Carretero anunció que llevaría a la empresa ante los tribunales hace solo unos días por los cambios en el reglamento del consejo aprobado en la última reunión del máximo órgano de gestión del grupo. La compañía introdujo la obligación de que los consejeros tengan "previa y discrecional" autorización del consejo para comprar o vender acciones de la empresa.
Los títulos de la compañía cotizan en el mercado con un valor superior a los 2,50 euros, un 1,5% más que al inicio de la sesión.
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