Inicio de las negociaciones

Norwegian fía a Garrigues la gestión del mayor ERE de todas las aerolíneas

La compañía low cost abre el periodo de consultas y marca distancias con el comité de empresa. Están en juego más de 1.100 empleos.

Norwegian
Norwegian cerrará su base de Barcelona.
Europa Press

El primer Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en el sector de las aerolíneas en España estará firmado por Norwegian. La empresa low cost vive momentos difíciles en su país materno y en el resto de territorios en los que mantiene sus bases. El coronavirus dio la puntilla a su negocio y abocó a la firma con sede en Oslo a reducir su negocio a la mínima expresión en todos sus países, incluido España. El ajuste se traducirá en un despido colectivo que puede afectar hasta a más de un millar de empleados. De momento, la compañía se ha apoyado en el bufete Garrigues para negociar y cerrar los flecos del proceso en pro de un acuerdo.

Así lo confirman distintas fuentes a La Información, que inciden en que el periodo de consultas ha arrancado esta semana y las negociaciones se encuentran todavía en una fase muy preliminar. A falta de que las posturas de ambas partes se acerquen, empresa y comité, formado por USO y Sindicato Español de los Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA), siguen exponiendo sus principales motivos para realizar el ERE o, en su defecto, oponerse. 

La propuesta de la empresa es similar a la del anuncio inicial: despedir al 85% de la plantilla (1.191 trabajadores) y dejar inoperativas y sin tripulaciones tres de las cinco bases de corto radio que Norwegian tiene en España (Barcelona, Gran Canaria y Tenerife Sur). En esencia, se trata del único y mayor despido colectivo de una aerolínea en España tras el coronavirus. Otros competidores, como Air Europa, perteneciente al grupo IAG (British Airways, Iberia, Vueling y Air Lingus), deslizó la posibilidad de ejecutar recortes en su plantilla hace meses, pero no ha concretado ninguno de sus ajustes hasta entonces.

Las salidas de los afectados por Norwegian, de acuerdo a fuentes sindicales, se saldarían con una indemnización de 20 días por año trabajado. No se ha abierto la puerta a alternativas como bajas incentivadas o recolocaciones. La compañía no ha querido hacer comentarios sobre la evolución de las negociaciones.

Garrigues, por su parte, ejerce como representante de la parte empresarial en las pocas reuniones que hasta el momento se han llevado a cabo -ayer, miércoles, se celebró el tercer encuentro en apenas una semana-. 

El bufete, el más grande por volumen de negocio en el sector legal -es una de las firmas de referencia en derecho laboral en España, junto a otras de la talla de Sagardoy y Uría Menéndez-, lleva años prestando sus servicios para la compañía noruega. En los últimos meses, ha ejercido de asesora para el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). La medida, que se ha extendido para prácticamente la totalidad de la plantilla hasta el día de hoy, ha terminado siendo insuficiente y ha desembocado en este despido colectivo.

Norwegian no es la única empresa en el sector de la aviación en la que Garrigues ha mostrado interés. La compañía cuyo presidente ejecutivo es Fernando Vives se ha ofrecido a asesorar también al gestor aeroportuario Aena en la negociación de su nuevo convenio colectivo. La compañía presidida por Maurici Lucena baraja el nombre de varios candidatos (ha recibido hasta seis propuestas distintas) y espera escoger a uno de ellos antes del verano.

Norwegian, repliegue tras años de crecimiento en España

El pasado mes de noviembre, Norwegian anunciaba su proceso de reorganización interna. Bajo el nombre de examinership, la compañía se refugiaba bajo la legislación irlandesa para proteger sus activos frente a las reclamaciones de sus acreedores. Por ejemplo, ahora mismo mantiene deudas con empresas del sector turístico como el proveedor tecnológico Amadeus, la aerolínea Iberia y hoteleras como Iberostar o Axor.

La evolución de la compañía, que llegó a España con la esperanza de colarse en el segmento low cost entre EasyJet y Vueling, ha dado un giro con motivo de la crisis sanitaria. Si antes de la pandemia estaba entre el top 10 de compañías aéreas en el mercado España-Unión Europea, según los datos oficiales del Ministerio de Fomento, ahora busca oxígeno para reestructurar su tamaño y repensar su negocio.

De momento, ha renunciado a los vuelos de largo radio en todos sus mercados y ha anunciado preconcurso de acreedores en tres de sus cuatro filiales en el mercado nacional. Estas sociedades siguen bajo este proceso y, de acuerdo a las fuentes consultadas, lo extenderá, al menos, hasta finales de este 2021. 

Mostrar comentarios