Nostoc, así es la empresa del veinteañero español que elogian Forbes y el mundo

  • Enrique Cat ha sido designado por el medio como uno de los 30 hombres menores de 30 años con más talento. "Acabo de contratar a 6 personas más", dice.
Enrique Cat, CEO de Nostoc Biotech.
Enrique Cat, CEO de Nostoc Biotech.

Enrique Cat es joven. Muy joven... No ha cumplido aún los 29 años, aunque -si se tienen en cuenta sus gustos musicales- podría parecer alguien bastante tradicional: es amante del rock and roll clásico, tanto norteamericano como británico, de las décadas en las que ni había nacido: los 60 y los 70. Por eso acaba de comprarse una guitarra y tiene un piano donde mata el gusanillo interpretando temas de Led Zepelin y otros grandes grupos de todos los tiempos.

Al margen de sus aficiones, el muchacho ha comenzado a deslumbrar al mundo empresarial, más allá de las fronteras españolas. Precisamente, la mirada de Forbes, una de las publicaciones económicas más prestigiosas e influyentes del mundo, acaba de posarse sobre su emprendimiento y sobre su "increíble talento". El medio lo nombró hace escasos días como uno de los 30 ciudadanos 'under 30' (menores de 30 años) más talentosos, debido a su startup y a su capacidad para "buscar soluciones creativas a problemáticas globales". 

Cat creó hace tres años Nostoc Biotech, empresa pionera en la bioagricultura especializada en la innovación. No utiliza pesticidas químicos. Su iniciativa se dedica a la fabricación de biofertilizantes para la agricultura. Todos los productos que crea son ecológicos y "cuentan con comunidades que incluyen más 200 microorganismos vivos. Estos aportan nutrientes a los cultivos y los protegen contra las plagas y enfermedades", explica a lainformacion.com.  El desarrollo de su gran idea innovadora despierta todo tipo de elogios planetarios.

Su voz resulta amable y serena al escucharlo hablar sobre los orígenes del proyecto, que comenzó a concebir cuando tenía apenas 25 años. Eso sí, su tono en la conversación se torna más apasionado al referirse al inusitado crecimiento que en apenas tres años ha tenido la empresa, que fue una de las tres primeras en obtener 250.000 euros de financiación de La Bolsa Social, la primera plataforma española de equity crowdfunding aprobada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

"Nuestros productos son únicos"

"Empezamos con un proyecto de gestión de residuos, que consistía en el tratamiento con lombrices de la materia orgánica que se produce en los hogares. Trabajamos con el humus de la lombriz. Su valor está en los microorganismos que produce. Después derivamos en esta idea, que es la de ofrecer en el mercado productos ecológicos que, hasta ahora, son únicos", comenta el CEO de la firma.

Nostoc se ha convertido en la primera compañía que utiliza humus de lombriz y combina los microorganismos para conseguir grandes resultados, como aumentar la producción o eliminar plagas. Entre sus logros, sus productos (que "resultan un 20% más económicos que la competencia", según asegura la página web oficial de la firma, se comercializan bajo demanda y se distribuyen a través de una red comercial y de distribuidores) ya han conseguido eliminar los nematodos, la yesca, o la araña roja que afecta a muchos invernaderos, o el pulgón en frutales.

De aquella idea embrionaria (Cat estudiaba Biología en la Universidad Complutense de Madrid y comenzó esta aventura junto a Guillermo Herrero, su socio y cofundador de Nostoc Biotech) a la actualidad, los números y la tendencia de expansión de la empresa provocan asombro: "Empecé esto con mi socio. Éramos dos. En poco tiempo fuimos creciendo mucho. Pasamos a tener diez empleados en plantilla, ahora acabamos de contratar a seis personas más, y a ellos hay que sumar el número de colaboradores que tenemos", destaca, orgulloso.

En volumen de negocio, su empresa avanza firme. "Nuestra facturación alcanzará los 450.000 euros al finalizar este año, y se duplicará respecto a 2016. Por otra parte, será más de cuatro veces y media superior a cuando arrancamos, en 2014. Nuestro negocio siempre mostró una tendencia al alza. En 2015 facturamos 100.000 euros", destaca este joven, soltero, quien no llegó a terminar su carrera universitaria como biólogo, y finalmente continuó su instrucción en el reputado Mondragon Team Academy (MTA). "Yo acabé haciendo el grado oficial europeo en el Laboratorio LEINN (Aprendizaje, liderazgo e innovación", cuenta.

"Un reconocimiento a todo el equipo" 

Respecto al reconocimiento de Forbes, que lo considera uno de los jóvenes menores de 30 años más talentosos e influyentes, admite que sabía "desde hacía varias semanas" que había entrado en ese prestigioso e influyente ranking, pero oficialmente esto se hizo público hace escasos días. "Para mí no es un reconocimiento personal, sino un premio a todo el proyecto y al equipo que hacemos Nostoc", manifiesta.

Al hablar de distinciones, precisamente, habrá que decir que Cat y su empresa no paran de acumular premios: por ejemplo, el más grande certamen de emprendedores universitarios del planeta, el Global Student Entrepeneur Awards (GSEA), también se ha rendido a sus pies.

También Nostoc ha ganado uno de los principales galardones en los 'Premios Ecoemprendedores BioCultura' (organizados por BioCultura y Green Business Spain), y en el Global Keiretsu Forum Madrid en 2015 (que le distinguió por ser "la primera empresa de productos que, a través de un conjunto de microorganismos vivos de humus de lombriz combinados de formas distintas para diferentes propósitos se postula como una alternativa real a productos químicos y a otros productos biofertilizantes"), solo por citar algunos reconocimientos. Como queda claro, la empresa tiene un enorme presente, pero todo indica que su horizonte hacia el mundo puede resultar inmenso en un futuro cercano.

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