Las obras de construcción de los túneles de Pajares llegan a su fin tras 19 años

Ha tardado casi 19 años en suceder, pero por fin se puede dar por finalizada la obra de construcción de los túneles de Pajares, la infraestructura ferroviaria más compleja y cara que se ha puesto en marcha en España, en la que el Gobierno lleva invertidos más de 4.000 millones de euros. La próxima semana, la Dirección General de Construcción de Adif formalizará el traspaso de la infraestructura a la Dirección General de Circulación y Gestión de Capacidad para que Adif Alta Velocidad —la filial encargada de los tramos de la red rápida española— efectúe todas las pruebas de validación de las instalaciones antes de su puesta en servicio. 

La fecha que Adif ha asignado para este hito es el próximo martes 21 de febrero, según adelantó El Comercio. Esta fecha retrasa inevitablemente los plazos que estableció el Ministerio de Transportes, que planteó el inicio de las circulaciones comerciales para el mes de mayo. La ministra Raquel Sánchez aseguró recientemente que las primeras circulaciones comerciales por la variante se darían en los meses de julio o agosto. 

El pasado 19 de enero, la presidenta de Adif y Adif AV, María Luisa Domínguez, mantuvo un encuentro con el gobierno asturiano para tratar los avances relativos a la apertura definitiva de la llamada "variante de Pajares", que sirve de alternativa a la línea convencional. Entonces, Adif explicó que no daría a conocer las fechas de la puesta en servicio hasta el mes de abril, una vez arrancadas las pruebas de fiabilidad. La respuesta aportada por la máxima responsable de la entidad pública no fue la esperada por el gobierno regional de Adrián Barbón, quien aceptó con resignación un nuevo retraso en la obra motivado por las exigencias en materia de seguridad ferroviaria.

Adif prefiere evitar dar fechas hasta abril porque es entonces cuando se espera que finalicen las pruebas dinámicas, de comunicaciones y fiabilidad que se ejecutarán al mismo tiempo que se verifica la infraestructura que se entregará la próxima semana. Estos testeos compartirán espacio con otros trabajos todavía sin rematar, como la apertura de nuevas salidas de emergencia o la validación del sistema de seguridad ERTMS. Este sistema permitirá a los trenes circular con una diferencia de unos cinco minutos entre sí, ya sean de pasajeros o mercancías, que también harán uso de la nueva infraestructura. 

El 80% del nuevo trazado se compone de túneles

Los nuevos túneles forman parte de un nuevo trazado de 37 kilómetros con doble vía, menor pendiente y altitud, y por tanto, menos expuesto a las inclemencias meteorológicas de la cordillera Cantábrica. Estará dotado del sistema de seguridad más avanzado, el ERTMS 2, y ya se considera como la línea más versátil de España, al poder circular por ella trenes de viajeros y mercancías en ancho estándar e ibérico. 

Durante las últimas semanas, Adif ha estado trabajando en temas de electrificación, protección civil, señalización, telecomunicaciones y obras en galerías de evacuación y pantalla, algunas de las cuales todavía no han concluido. De hecho, los plazos para finalizar las instalaciones de galerías y salas técnicas se extienden hasta finales de abril, y aunque se desarrollarán en paralelo con las mencionadas pruebas técnicas, impedirán que la puesta en marcha de los nuevos túneles llegue para antes de las elecciones de mayo, como siempre se ha pretendido desde el gobierno asturiano. 

También se están construyendo dos helipuertos y se sustituirá una depuradora. Antes del año que viene habrán llegado los nuevos pasajeros, una vez concluya la auscultación de los enlaces y los tramos de vía más próximos a estos. Una vez puesto en servicio el túnel seguirán las obras, ya que Adif tiene previsto reponer el gasoducto que une León y Asturias hasta principios de 2024, cuando por fin se podrá dar por acabado definitivamente.

Para todos estos testeos, Adif contará con el apoyo de Renfe, encargado de operar, al menos inicialmente, la ruta entre Asturias, León y Madrid. Para estas pruebas, la operadora pública llevará distintos modelos de trenes para verificar si se cumplen las velocidades máximas teóricas e iniciar la formación de sus maquinistas. Uno de los primeros trenes que verán Pajares será el Avril S-106 de ancho variable que Renfe destinar a todos aquellos destinos que no cuentan con líneas 'puras' de alta velocidad cuando también finalice sus propias pruebas de puesta en vía. 

Sustituir un trazado de hace dos siglos

La entrada en servicio de la variante de Pajares supondrá la clausura definitiva de la actual rampa de Pajares, infraestructura que se puso en servicio en el siglo XIX y que a día de hoy acoge miles de trenes de mercancías y pasajeros cada año pese a que su velocidad máxima no supera los 50 kilómetros por hora. 

Por el contrario, el nuevo trazado entre Pola de Lena (Asturias) y La Robla (León) permitirá velocidades de hasta 220 km/hora, se realizará en 15 minutos y acortará el tiempo de viaje entre Oviedo y Madrid, aunque sin llegar a bajar de la barrera de las 3 horas. Adif califica a esta obra como "la más compleja desarrollada en España", dadas las características del terreno y por la necesidad de unificar parámetros para el paso de mercantes y trenes de viajeros.