Orange deshoja la margarita del fútbol mientras encalla su pacto con sindicatos

  • La teleco dice que su plan para tener "el mejor contenido, incluido el fútbol". Acumulan casi una veintena de reuniones sin acuerdo para su convenio.
Orange bolo
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EFE

Orange España sigue deshojando la margarita para ver si, finalmente, saca la chequera para comprar todos los derechos del fútbol la próxima temporada. Mientras lo hace, trata de desbloquear las conversaciones con los sindicatos para alcanzar un nuevo convenio colectivo. Seis meses y casi una veintena de reuniones después, la revisión salarial es uno de los grandes obstáculos.

Telefónica acaba de presentar formalmente su oferta mayorista del fútbol para el ejercicio 2019/2020. La operadora ofrecerá dos canales: La Liga (incluido El Partidazo) y la Champions League. Vodafone se mantiene firme y asegura que no comprará el fútbol. La que aún sigue deshojando la margarita es Orange. Su plan es "tener los mejores contenidos, el fútbol entre ellos", según explican fuentes oficiales, que insisten en que "aún es pronto".

Dado que Vodafone ha manifestado abiertamente que no entrará en el negocio del balompié, Orange deberá afrontar un sobrecoste en la factura. En total, según los cálculos del sector, podría costarle unos 300 millones de euros todos los derechos de la próxima temporada, tanto de La Liga como de la Champions League.

Esa decisión sigue analizándose mientras tratan de desbloquear las conversaciones con los sindicatos para cerrar un nuevo convenio colectivo que rija a su plantilla en España -conformada por más de 5.600 empleados- durante los próximos años. Las negociaciones se están alargando con serias dificultades para alcanzar un acuerdo definitivo que sirva para sellar la 'paz'.

Una subida salarial insuficiente

Uno de los grandes obstáculos está siendo la revisión salarial. Según confirman tanto CCOO como UGT, la compañía no está dispuesta a eliminar el tope para la subida de las nóminas en las escalas más altas (superior a 45.700 euros al mes). La última propuesta que la dirección puso sobre la mesa: un 1% de subida si hay crecimiento de Ebitda para los que ingresen entre 35.000 y 45.700 euros y sin revisión para los que ganen más (sólo el 1% como 'paga' si el Ebitda crece un 18% por encima del objetivo).

En el caso de los salarios más bajos, sí que se plantea una subida del 3% que reclamaron los sindicatos. "Es un colectivo también reducidísimo que en el caso más alto tendría una revisión mejorada de 19 euros brutos al mes", explican desde UGT. Es para los que ganan menos de 27.100 euros. Para los que están entre esa cifra y 30.000, un 1,5% más, y para los que están entre 30.00 y 35.000 euros un 1,25%.

Para los sindicatos, se trata de una exigencia clara para llegar a un acuerdo. "Si ahora, con los magníficos resultados y crecimiento de Orange no conseguimos esos avances... ¿cuándo van a conseguirse? Ahora o nunca", apuntan desde UGT. Por su parte, CCOO incide también en la "buena situación económica y financiera de la empresa".

Buenos resultados

Todos ellos insisten en que las mejoras de los resultados han de verse reflejados en las condiciones salariales. En la última reunión, que tuvo lugar la pasada semana, la compañía puso sobre la mesa las previsiones económicas de la compañía. En este sentido, alertó sobre la enorme competitividad en el sector y las dificultades para hacer crecer los beneficios brutos o los ingresos.

Sin embargo, los sindicatos insisten en que este escenario pesimista también fue planteado en 2014, cuando negociaron el actual convenio. ¿Consecuencia? "La realidad demostró que las previsiones no eran correctas, y a pesar de ello crecimos muchísimo pero no se trasladó a la plantilla ese crecimiento", lamentan. En este sentido, recuerdan las buenas cifras del grupo en los últimos tres años, tras convertirse en el segundo operador tras Telefónica en ingresos.

Al margen de la revisión salarial, en la negociación sí que se han conseguido otras mejoras en teletrabajo, movilidad sostenible y algunos cambios en las categorías laborales. Pero, para el comité de empresa se trata de propuestas que afectan a colectivos muy concretos, sin medidas universales. Mañana habrá otra oportunidad más. Será la reunión número 18 desde que en enero arrancaran las conversaciones. Siete meses después, Orange sigue sin convenio colectivo. Mucha tela aún que cortar.

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