El presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, se embolsó 6,7 millones de euros durante el pasado año, entre las retribuciones fijas y variables. Esto representa una caída del 22%, debido principalmente a que durante el ejercicio 2021 ingresó un bonus millonario 'extra' como premio por las desinversiones ejecutadas en Telxius y Reino Unido. Si se compara con los emolumentos del año 2020, el salario crece de manera significativa.
En concreto, según queda reflejado en el informe de remuneraciones de la compañía presentado en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el pago en metálico fue de 6,12 millones de euros a lo que hay que sumar 452.000 euros de beneficio bruto de las acciones; 132.000 euros de remuneración por el plan de pensiones, y 81.000 euros por otros conceptos. El salario fijo fue de 1,92 millones, con 4,2 millones de variables.
Por su parte, el consejero delegado de la compañía, Ángel Vilá, ha percibido 6,6 millones de euros, una caída del 24,5%, por esa falta del bonus extraordinario. En metálico han sido 4,5 millones (1,6 millones fijos y 2,9 millones en variable) además de 335.000 euros de beneficio bruto de acciones; 72.000 euros en remuneración de sistemas de ahorro y 83.00 euros en otros conceptos como seguros de vida, médicos y un vehículo de empresa, valorado en 18.000.
Respecto a los incentivos a largo plazo, el 31 de diciembre de 2022 finalizó el periodo de medición de objetivos del tercer ciclo del bonus 2020-2023. El 50% estaba vinculado a la evolución en bolsa y la otra mitad a la generación de caja. No se ha devengado importe alguno derivado por el precio de los títulos. El incentivo se abonará en marzo y el valor económico a percibir en acciones por Álvarez-Pallete y Vilá, considerando el precio de la acción a 31 de diciembre es de un 25,35% del incentivo máximo concedido.
La retribución extraordinaria de 2021, que se extendió a un conjunto de directivos de todo el grupo, premia no sólo el acuerdo con Liberty Global para combinar O2 y Virgin Media en Reino Unido. También incluye la venta de la división de torres de telecomunicaciones de Telxius a American Tower, la compra de los activos móviles de Oi en Brasil junto a TIM y Claro (Carlos Slim) o la creación de una joint venture de fibra con Allianz en Alemania.
Telefónica cerró el ejercicio 2022 con una subida de casi el 2% en las ventas totales hasta rozar los 40.000 millones de euros. Después de varios años con reducciones en el volumen de negocio, impactado especialmente por el intercambio de las divisas, logra un crecimiento en todos los mercados, incluida Latinoamérica, donde en el cuarto trimestre del año sí que se ha percibido una caída del 8%.
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