El juez de la Audiencia Nacional Alejandro Abascal ha ordenado de nuevo el ingreso en prisión del principal acusado por la presunta estafa con criptomonedas de Algorithm Goup, Javier Biosca, tras solicitar el fiador de su fianza la devolución de la misma. Biosca compareció ayer ante el titular del juzgado central de instrucción nº 1, que en un auto al que ha tenido acceso Efe ha decretado su ingreso en prisión y le ha impuesto una fianza de un millón de euros, "al no haber fianza depositada alguna que garantice su presencia, y ante el evidente riesgo de fuga". Javier Biosca ha permanecido aproximadamente un año en prisión, hasta mediados del pasado mes de junio.
El magistrado relata que el fiador personal de Biosca relató que le fue imposible ponerse en contacto con éste, "ni a través de llamadas telefónicas, cuyo teléfono estaba apagado continuamente, y pudiendo comprobar que en el domicilio designado tras su puesta en libertad no había nadie desde el 4 de julio del año en curso". Tras comprobar que en el domicilio de Biosca se había realizado un traslado de muebles, el fiador solicitó la devolución del millón de euros que consignó para garantizar la libertad provisional del acusado, el pasado junio.
Desde la Asociación de Afectados por Criptomonedas, la abogada Emilia Zaballos, que ejerce la acusación popular, ha mostrado su satisfacción por el nuevo ingreso en prisión de Biosca, un "éxito para la asociación", y ha valorado el trabajo de sus abogados defensores, con los que estaban muy avanzadas las negociaciones de un acuerdo para que se devolvieran a los inversores las cantidades defraudadas.
Zaballos confía en que Biosca les reciba en prisión para seguir negociando el reembolso a los afectados, aunque recuerda "que ha tenido tres semanas para pagar -el tiempo que ha estado fuera de prisión- y no lo ha hecho". En la jornada de ayer, el bufete que representaba a Biosca renunció a representarle por ser éste "refractario a todos los consejos, incumplir absolutamente todos los acuerdos alcanzados y los compromisos de pago con los afectados". Asimismo, señalaban "la fuerte percepción" de que intenta ponerse "fuera del alcance de la justicia".
Aunque la cuantía defraudada por Algorithms Group está aún por determinar, a través de las acusaciones particulares los perjudicados reclaman 818,5 millones de euros a esta sociedad, a través de la cual operaba Biosca. Junto con su mujer y su hijo, se le investiga por supuesta estafa, intrusismo, blanqueo, delitos societarios, apropiación indebida y asociación ilícita, tras captar clientes con la promesa de rentabilidades del 20% o del 25% semanal.
A partir de los primeros meses de 2020 comenzó a dejar de pagar a la mayor parte de los inversores, algunos de los cuales son a su vez plataformas de inversión en bitcoines que invertían en la empresa atraídos por los altísimos intereses. Biosca ha permanecido un año en prisión, que abandonó a finales de junio tras depositar la fianza de un millón de euros impuesta por el juez, fianza que ha sido ahora retirada por su fiador.
Las negociaciones del acuerdo para resarcir a los perjudicados estaban muy avanzadas, según confirmó a Efe la abogada Emilia Zaballos, que representa a más de 700 clientes de Algorithms.
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