En plena nueva ola de reestructuraciones del sistema financiero, BBVA ha dado un paso al frente para reforzarse de cara a posibles operaciones con la venta de su negocio en Estados Unidos que le reportará, en el plazo de seis a nueve meses en que se haga efectiva, un total de 9.700 millones de euros de capital fresco con el que poder acometer una eventual fusión. Tras hacerse pública la compra por parte de PNC de su filial, tanto el presidente de la entidad vasca, Carlos Torres, como su consejero delegado, Onur Genç, han dejado claro que su objetivo es realizar una recompra de sus acciones "relevante", si bien no han descartado dedicar parte a una consolidación.
El Banco Central Europeo (BCE) está siendo especialmente proactivo a la hora de instar a las entidades de la zona euro a iniciar un proceso de concentración con el que ganar músculo para capear la crisis. Una vuelta de tuerca al proceso iniciado tras la pasada crisis financiera que ya ha provocado movimientos entre Caixabank y Bankia y, de nuevo y tras meses de distanciamiento, entre Unicaja y Liberbank. Los responsables de BBVA han dejado caro que van a "analizar siempre las oportunidades que salgan en sus mercados core (claves)", de modo que con Turquía atravesando por una grave crisis y la imposibilidad de crecer más en México, la opción más clara estaría dentro del territorio nacional.
Dados los fuertes descuentos a los que cotizan los bancos en bolsa, BBVA tendría ahora mismo a tiro a toda la banca mediana, si bien es cierto que el Banco Sabadell ha sido en concreto la entidad con la que más se le ha venido relacionando en los últimos meses. De hecho la entidad que capitanea Jaime Guardiola ha contratado al banco de inversión Goldman Sachs para analizar sus posibilidades en nuestro país en lo que a consolidación se refiere, si bien en principio apuesta por continuar en solitario. Además de BBVA, en las quinielas sobre eventuales 'parejas de baile' incluye también a Abanca y a la entidad resultante de la alianza en marcha entre Caixabank y Bankia.
Los 9.700 millones equivalen prácticamente la mitad de la capitalización del grupo vasco a precios de cierre previos al anuncio (21.163,8 millones). Representan 4,4 veces el valor en bolsa del Sabadell (2.200 millones de euros), 2,5 veces el de Bankinter (3.883 millones) y 5 veces la suma de las dos entidades de menor tamaño que cotizan en el Mercado Continuo, Unicaja y Liberbank (1.147 y 816 millones de euros, respectivamente). De hecho, podría comprarse las cuatro entidades citadas a la vez o, incluso, comprar dos veces Bankia, que actualmente está en conversaciones con Caixabank para una fusión entre las dos entidades.
"Desde un punto de vista de valoración, los bancos europeos y los españoles en particular, están cotizando a ratios valor en libros por debajo de 0,4 veces. En un contexto donde las medidas de expansión económicas y fiscales permanecerán activas, la noticia de la vacuna puede suponer el inicio de la recuperación de un sector muy infravalorado", apunta Javier Molina, portavoz en España del bróker eToro.
