Resultados del ejercicio 2020

REE redujo los beneficios un 13% por el recorte de ingresos regulados e Hispasat

La compañía cubrió un deterioro del valor de los activos de la compañía de telecomunicaciones por importe de 122,3 millones, según las cuentas anuales.

La presidenta de REE Beatriz Corredor, junto al consejero delegado Roberto García Merino.
La presidenta de REE Beatriz Corredor, junto al consejero delegado Roberto García Merino.

Red Eléctrica de España (REE) ganó el pasado ejercicio 621,2 millones de euros, un 13,1% menos que en el ejercicio anterior debido a los recortes en los ingresos regulados y las provisiones realizadas tras la compra de Hispasat. La compañía cubrió un deterioro del valor de los activos de la compañía de telecomunicaciones por importe de 122,3 millones, según las cuentas anuales enviadas a la Comisión Nacional del Mercado de Valotres (CNMV).

La cifra de negocio en 2020 del grupo presidido por Beatriz Corredor alcanzó los 1.985,8 millones de euros, lo que refleja unos menores ingresos de transporte en España (200 millones menos), consecuencia de la aplicación de los nuevos parámetros retributivos establecidos por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), compensada en parte por la mayor retribución de la operación del sistema en España y del incremento de la actividad de telecomunicaciones.

En 2020, el Grupo Red Eléctrica realizó inversiones por un total de 895 millones de euros, de los que 383 millones se destinaron al desarrollo de la red de transporte en España. Mientras, la deuda financiera neta al cierre del ejercicio de la compañía era de 6.113,3 millones de euros, cifra ligeramente superior a la existente a 31 de diciembre de 2019.

REE ha elaborado un nuevo plan estratégico en el que prevé invertir 2.800 millones en los próximos cinco años en su faceta de transportista único y operador del sistema eléctrico (TSO) para digerir la explosión renovable que supone la incorporación prevista de 6.000 MW anuales durante la próxima década.

La inversión en redes es sólo una parte de la prevista por el grupo, del que forman parte también las filiales Red Eléctrica Internacional en Perú, Chile y Brasil; el negocio de fibra óptica (Reintel); el de satélites de Hispasat -adquirido a Abertis en 2019- o la filial canaria Reincan. Las telecomunicaciones son la estrella. No sólo porque se mantiene abierta la posibilidad de venta de una parte de Hispasat, sino porque REE prevé dedicar, en el horizonte de 2023, un empujón de 300 millones para el lazamiento y puesta en operación del satélite Amazon Nexus, destinado a captar negocio de comunicaciones en América del Sur.

La presidenta de REE, Beatriz Corredor, que asumió el cargo hace un año tras la dimisión de Jordi Sevilla por discrepancias con la ministra de Transición Ecológica Teresa Ribera, tiene ante sí un reto con muchas caras: mantener la confianza de los inversores -acostumbrados a un dividendo seguro y crecientre durante una década- pese a los recortes de ingresos por las actividades reguladas; cumplir con los planes de integración de renovables que impulsa el Gobierno y atenerse estrictamente a la separación de los negocios regulados de los que no lo son.

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