Roig apuesta por la comida japonesa, los relojes o el Hyperloop en sus inversiones

Una cadena de comida japonesa para llevar, un buscador de vuelos baratos para viajes o una tienda de relojes de diseño. Estas son algunas de las nuevas inversiones que el presidente de Mercadona, Juan Roig, ha llevado a cabo en el último año a través de su sociedad Angels Capital. Pese a los nuevos movimientos, Sothis, la consultora tecnológica que trabaja para la cadena de supermercados, es su mayor apuesta.

Roig fundó Angels Capital a finales de 2013, en paralelo a la puesta en marcha de Lanzadera -hoy la aceleradora está bajo su paraguas-. El objetivo: centralizar ahí sus inversiones personales al margen de Mercadona y que servirían, en parte, para respaldar proyectos nacidos en la Marina de Empresas de Valencia. En 2018 lo cerró con cinco nuevas inversiones y una sola venta, cuya cuantía no ha sido desvelada. Su cartera la valora en más de 30 millones de euros.

Durante el pasado año sacó la chequera para hacerse con acciones de dos startups que pasaron por su aceleradora: Colorfood Retail y Airhopping. De la primera, que ha puesto en marcha la cadena de comida japonesa Kento en Valencia, se ha hecho con el 14%. De la segunda, un buscador de vuelos baratos, controla casi un 11%. Ambas han pasado por diferentes programas de Lanzadera.

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Estas son las dos nuevas inversiones. Pero hay otras compañías que se han sumado al portfolio de Roig no por el desembolso para la adquisición de acciones en una ampliación, sino por la conversión de un préstamo en títulos. En este último grupo hay tres incorporaciones. La que más destaca es Zeleros Global, la compañía surgida en la Universidad Politécnica de Valencia que desarrolla un modelo del tren de Elon Musk en la Marina de Empresas.

A los jóvenes ingenieros se suman Panapop, la tienda online de relojes de diseño principalmente dirigidos a mujeres, y Morpheus Aiolos, la compañía creadora del agregador de cuentas bancarias Afterbanks, donde también ha invertido entre otros el business angel François Derbaix. En estas tres inversiones se desconoce el porcentaje por el que ha convertido en acciones.

Estas son las nuevas incorporaciones del pasado año. En 2017 también convirtieron préstamos en acciones de la biotecnológica Quibim y SheetGo, que permite crear flujos de trabajo a través de hojas de cálculo. 

La única gran desinversión no es tecnológica

Estas fueron las nuevas apuestas. Pero, ¿y las desinversiones? Roig se desprendió de uno de los activos históricos: el Instituto Valenciano del Pie. Fue en 2014 cuando el presidente de Mercadona adquirió todas las acciones del Instituto (55.000 euros para hacerse con las participaciones que quedaban en manos de socios minoritarios).

A principios de este año, el instituto se vendió a la empresa Podoactiva. No se hizo público el precio pagado. Y en su memoria, Angels Capital sólo asegura que en diciembre se firmó un acuerdo vinculante de compraventa de participaciones de la sociedad, por lo que se revirtieron provisiones y se ingresaron 35.000 euros como anticipo. ¿Y el precio final? Se desconoce.

No es la única de la que Roig ha reducido su posición. Ha rebajado tres puntos hasta el 10% su posición en Boatjump, la plataforma de alquiler de barcos que pone en contacto a propietarios con usuarios interesados en navegar. La herramienta para crear vídeos rápidos en internet Playfilm vio como su ronda de financiación de un millón de euros firmada a principios de año hizo que el directivo redujera al 20% su posición tras dar entrada a inversores entre los que figuran el hoy candidato de Ciudadanos, Marcos de Quinto, el exdirector general de Google España, Javier Rodríguez Zapatero, o el exdirector de BBVA, Ángel Cano.

Si hay una apuesta destacada de Roig es la de Sothis Tecnologías de la Información, consultora tecnológica que tiene a Mercadona como su principal cliente. Entró en 2013 y tras diferentes ampliaciones y compensaciones de créditos se ha hecho con el 100% de la compañía. El pasado año lo cerró con unos beneficios operativos de más de 4,2 millones de euros.

Al igual que sucediera en la aceleradora de startups Lanzadera, la sociedad Angels Capital ha reducido de manera significativa sus pérdidas durante el pasado año hasta los 1,6 millones de euros (frente a los 6,7 millones de un año antes).