Dardo a Sandra Ortega

Room Mate presenta concurso tras el 'no' de la SEPI y el pulso con la banca

La cadena hotelera del empresario Kike Sarasola no ha llegado a tiempo a reflotar la compañía tras varios intentos por encontrar un inversor. Cuenta con una oferta que espera materializar próximamente. 

Kike Sarasola
Kike Sarasola, presidente y máximo accionista de Room Mate
CONTACTO vía Europa Press

Room Mate enfila el concurso de acreedores. Tras recibir la negativa del rescate de la SEPI y mantener un pulso constante con la banca acreedora, la compañía hotelera del empresario Kike Sarasola ha comunicado este viernes que ha presentado ya ante el Decanato de los Juzgados de lo Mercantil de Madrid la solicitud de concurso de acreedores voluntario, a la que va unida la venta de unidad productiva y una oferta vinculante por parte de un inversor que plantea la continuidad del negocio y el mantenimiento de los puestos de trabajo. Todo ello, sujeto al análisis del administrador concursal y a la aprobación del juez.

La empresa hotelera, que lleva meses buscando un inversor que sustituya a la participación que mantiene Sandra Ortega, matiza en su comunicado que el concurso afecta exclusivamente a la sociedad Room Mate S.A. y no al resto de mercantiles del grupo. "La cadena hotelera aborda así este procedimiento con el objetivo de garantizar la viabilidad y continuidad de su actividad empresarial, el servicio a sus clientes y el futuro de sus trabajadores y proveedores", explica. 

Hasta ahora, la compañía había mantenido negociaciones con el fondo de inversión Angelo Gordon, especializado para entrar en empresas en apuros. Esta oferta iba de la mano junto al grupo hotelero Westmont Hospitality Group, uno de los grandes gestores de hoteles en el mundo y que había explorado meses atrás la compra de otros hoteles en España, como la cadena Ayre, de El Corte Inglés y Palladium (familia Matutes). 

De momento, Room Mate no desvela nombres en su comunicado, pero sí afirma que cuenta con la solicitud de concurso de acreedores voluntario con venta de unidad productiva. Esta propuesta viene acompañada de una oferta vinculante por parte de un inversor. La oferta de este potencial nuevo propietario, explica la cadena hotelera, "plantea la continuidad del negocio y el mantenimiento de los puestos de trabajo".

Señala a Sandra Ortega

Tras meses de silencio, la compañía no ha dudado en señalar las causas de sus males. Además del golpe del coronavirus, que obligó a la empresa a tener cerrados sus hoteles y hundió sus ingresos, Room Mate ha señalado otra causa que le ha condicionado gravemente: los líos judiciales que tiene Sandra Ortega con los bancos acreedores. Esta disputa nace de la propia batalla que la hija del dueño de Inditex mantiene con el que era su asesor empresarial, José Leyte, a quien acusa de avalar en nombre suyo deuda de Room Mate sin su consentimiento.

La SEPI nunca llegó a analizar en profundidad el rescate de Room Mate

El bloqueo de la banca ha sido una constante en las negociaciones de la compañía hotelera para encontrar un nuevo inversor que, entre otras misiones, debía repagar un crédito puente de 18 millones de euros al fondo Atitlan Capital, de Roberto Centeno. Este préstamo se concedió de forma urgente y con un tipo de interés muy elevado para capear el primer año de pandemia. Su no devolución entrañaba riesgos. El principal: perder la compañía frente a Centeno. 

El desenlace de Room Mate también ha estado marcado por el no de la SEPI a conceder 52 millones de rescate. Su solicitud ni siquiera llegó a sobrepasar la primera criba que el Fondo de Solvencia (Fasee) realiza para más tarde licitar entre sus asesores expertos el análisis en profundidad del rescate. A preguntas de este medio, Sarasola explicó en junio del pasado año que la SEPI le había requerido más información, pero descartó que en ese momento su petición hubiese sido rechazada.

La vía del concurso

La compañía defiende que su situación actual es compleja. Aunque va camino de regularizar el pago con la mayoría de sus proveedores y está aprovechando la resurrección del turismo, el proceso concursal es la fórmula más adecuada para su viabilidad futura. Cita que la nueva ley concursal permitirá que el proceso sea eficaz y que por su parte contribuirá "con todo lo necesario para facilitar su desarrollo de la forma más eficiente".

Durante el tiempo que dure el proceso concursal, la empresa seguirá desarrollando su actividad con plena normalidad, por lo que quiere transmitir tranquilidad a clientes, proveedores y trabajadores. "El objetivo prioritario de la firma ha sido y es ofrecer el mejor servicio a sus clientes, siempre", concluye. 

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