Banco Sabadell deja clara la posición inamovible de su consejo de administración con respecto a su filial británica TSB, por lo menos por el momento. El consejero delegado del grupo, César González-Bueno, ha asegurado que el mandato de la cúpula es el de no vender, ni siquiera analizar las ofertas no solicitadas que se reciban. "Es una afirmación más gorda de lo que parece", ha dicho, tras repetidas preguntas por parte de los periodistas sobre este asunto en la rueda de prensa posterior a la presentación de los resultados correspondientes a los primeros nueve meses del año.
El CEO del banco ha reiterado en varias ocasiones que no se va a estudiar ninguna operación corporativa relacionada con TSB ahora mismo. "Las improvisaciones no son adecuadas en una profesión como esta, siento contestar con la misma letanía, pero el planteamiento y el mandato del consejo es claro", ha subrayado González-Bueno. Precisamente hace unos días, el consejo de administración de Sabadell informó de una oferta de compra por su filial por parte de Co-operative Bank, aunque rechazó la propuesta.
Sobre la oferta, ha explicado que él mismo y el presidente, Josep Oliu, respondieron en nombre del consejo por escrito a Co-operativa Bank, declinando su propuesta. "Nada ha cambiado, cualquiera puede hacer una oferta y nosotros, desde el punto de vista de gobernanza, contestaremos. No mantendremos negociaciones ni nos reuniremos con nadie", ha remarcado el banquero. En esta línea, ha comentado que TSB aporta más o menos el 20% a las ganancias del grupo, en línea con su consumo de capital, por lo que es un "gran contribuyente".
Precisamente estos días, González-Bueno emprendió un viaje a Reino Unido junto al director financiero del grupo, Leopoldo Alvear, para visitar a los equipos de su filial. El CEO ha trasladado su satisfacción por el desarrollo de la franquicia británica, con unos gestores absolutamente centrados en el cliente. "Estamos muy contentos con la actividad de TSB", ha deslizado. Alvear añadió que el banco británico "va fenomenal".
El grupo ha logrado encauzar su camino. La entidad ha obtenido un beneficio neto de 370 millones de euros entre enero y septiembre de 2021, lo que representa un 82,4% más que en el mismo periodo de un año anterior. Asegura que se sitúa ya en línea con todos los objetivos de su plan estratégico. La buena marcha del negocio bancario (mejora de márgenes, reducción de costes y menores dotaciones) y el curso positivo que ha adoptado TSB, que acumula su tercer trimestre con ganancias, han sido los principales impulsores de la mejora de sus cuentas. Además, inicialmente calculaba que ahorraría al menos unos 100 millones de euros por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), si bien ahora estima que alcanzará los 130 millones de euros anuales.
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