Santander recorta su estructura regional y avanza en su integración con Popular

  • El banco aún no ha aplicado despidos en su red comercial a la espera de que comience la negociación del ERE, prevista a partir de marzo.
Sucursal del banco Santander
Sucursal del banco Santander
EUROPA PRESS - Archivo

Sin prisa pero sin pausa, Santander continúa quemando etapas en su integración con el Popular. La última de ellas ha sido la remodelación de la estructura regional del grupo, cuya organización se ha simplificado para adaptarla a los estándares del banco cántabro, según informaron fuentes conocedoras.

El pasado verano, el banco que preside Ana Botín anunció la unificación de las direcciones territoriales de ambas entidades -prácticamente una por cada Comunidad Autónoma- con el objetivo de dar “más empuje” a la red comercial. El paso siguiente, efectuado a finales de diciembre, se ha producido un escalón por debajo.

Antes de la reestructuración, bajo cada dirección territorial, Popular contaba con una serie de directores regionales -en Santander se denominan directores de zona- que a su cargo tenían un director comercial. Esta última figura es la que acaba de desaparecer tras la unificación, aunque, por el momento, no se han producido salidas a la espera del ERE de la red.

De este modo, los directores comerciales de Popular han sido reubicados en oficina de forma provisional hasta que concluya la integración, lo que está previsto que tenga lugar el próximo junio. Por su parte, algunos directores regionales ejercen ahora como jefes de zona de Santander, mientras que a otros se les ha colocado como responsables de oficinas significativas o al frente de grupos de sucursales enfocadas en negocio de empresas.

En cualquier caso, para concluir la fusión de las redes comercial de Santander y Popular aún queda pendiente la integración tecnológica y que la dirección del banco aplique un nuevo ERE, cuya negociación con los representantes de los trabajadores comenzará a partir de marzo, tras la celebración de las elecciones sindicales. En la integración de los servicios centrales ya salieron 1.100 personas.

El nuevo ERE afectará a 2.000 empleados

Según los cálculos internos realizados por Santander antes de adquirir Popular, el ajuste de plantilla de la red afectará a 2.000 empleados, a los que se podrían unir algo más de 700 trabajadores más de los servicios centrales. No obstante, fuentes sindicales temen que la cifra se pueda elevar a 4.000 personas ante el alto grado de solapamiento existente en algunos territorios como Madrid o Galicia.

Precisamente es en territorio gallego donde el banco arrancó la fusión tecnológica. Se escogió esta región ante el alto grado de complejidad que suponía integrar los sistemas informáticos de Santander con los de Pastor y Popular. Por el momento, el proceso transcurre sin incidencias significativas y el banco podría extender la migración informática al resto de España a partir de abril.

El encargado de completar la integración de ambas entidades estaba previsto que fuese José Antonio Álvarez, en condición de presidente ejecutivo de Santander España. No obstante, tras el frustrado fichaje de Andrea Orcel como consejero delegado, finalmente será Rodrigo Echenique quien acometa esta tarea a no ser que el banco encuentre un sustituto antes.

En una carta dirigida a la plantilla, Ana Botín explicó el jueves pasado que el grupo cántabro se encuentra actualmente realizando un proceso de búsqueda “interna y externa” para reemplazar a Echenique al frente de la filial española. Según informó la presidenta, esta previsto que el relevo se ejecute durante la próxima primavera.

Mostrar comentarios