El momento de dar el salto al parqué está cada vez más cerca para Metrovacesa - se prevé que se produzca en la primera mitad de 2018 - y tanto la compañía como sus principales accionistas (Santander, BBVA y Banco Popular) trabajan para disponer de la estructura y los equipos de trabajo más adecuados para gobernar la salida a bolsa de la que ya se ha convertido en la mayor inmobiliaria del país por el valor de sus activos: 6.000 metros cuadrados de cartera de suelo y un potencial de construcción de más de 40.000 viviendas.
El último paso en ese proceso se acaba de concretar en la última Junta de Accionistas y es la incorporación al Consejo de Administración de la compañía de Carlos Manzano, el gestor inmobiliario que hasta el pasado verano dirigía el área de Real Estate para España y Portugal de Deutsche Bank y que el Santander alistó para su división inmobiliaria en uno de los movimientos de directivos más relevantes de los últimos meses en este mercado.
Manzano está llamado a ser el hombre fuerte del Santander en Metrovacesa, un proyecto crítico para el banco capitaneado por Ana Botín, no solo porque controla el 70,3% del accionariado de la entidad -si se agrega el 61,1% en manos del Santander de forma directa y el 9,2% 'heredado' de la participación del Banco Popular-, sino porque constituye una de las herramientas con más potencial de las que dispone para recuperar parte de la rentabilidad perdida por sus activos inmobiliarios durante el proceso de saneamiento del banco. No hay que olvidar que en Metrovacesa Santander y Popular han depositado en conjunto una cartera de suelos que en un cálculo aproximado tienen un valor de 1.800 millones de euros.
Carlos Manzano ocupará el puesto en el Consejo de Administración y en el Comité de Auditoría de Metrovacesa que hasta ahora habitaba uno de los consejeros históricos de la compañía, José María Fernández Conquero, que se sentaba en el principal órgano de gobierno de la inmobiliaria desde el año 2010 en representación del Banco Popular y que ha cesado en sus funciones por decisión voluntaria, según informan fuentes de la compañía. Desde Metrovacesa se destaca la dilatada experiencia del nuevo consejero en el mercado inmobiliario y su capacidad en los ámbitos de desarrollo corporativo y control financiero.
En el perfil profesional que se trazaba del nuevo consejero de Metrovacesa en el folleto de admisión a cotización en el MAB de Trajano Iberia, la socimi lanzada por la división de gestión de activos de Deustche Bank para sus clientes premium y de la que Manzano era gestor, se destaca su 'expertise' en el análisis de compañías inmobiliarias, procesos de adquisición corporativa, financiaciones bancarias y diseño, implementación y seguimiento de planes de negocio.
Carlos Manzano ya trabajó en su día en la órbita de Metrovacesa, durante su etapa como gestor en Gecina, la inmobiliaria cotizada francesa controlada por la española en la etapa de los Sanahuja, y también fue director de Planificación Financiera y Control de Bami hasta su fichaje por Deutsche Bank como responsable de la división inmobiliaria del área de gestión de activos de la entidad alemana, donde ha dirigido la gestión de 450 millones de euros en activos inmobiliarios en renta y ha supervisado la operativa de dos fondos inmobiliarios con inversiones en Portugal y Marruecos.
Metrovacesa presentó el pasado mes de julio las líneas maestras de su hoja de ruta para los próximos años. La intención de la compañía es desarrollar los suelos en cartera para edificar entre 4.000 y 5.000 viviendas anuales durante los próximos ocho diez años y convertirse de este modo en la principal promotora del país. Este año, el plan de la compañía era empezar la construcción de 2.000 viviendas.
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