Primera reunión de Santander con los sindicatos para informar sobre el ERE. Representantes de la compañía y los trabajadores se han reunido este martes para explicar y conocer el alcance de las medidas de reducción de plantilla que salían a la luz la pasada semana en plena presentación de resultados trimestrales de la entidad. Fuentes sindicales explican que esta primera reunión ha sido de "situación" y que en ella se ha explicado la necesidad de llevar a cabo un ajuste, si bien se ha evitado cifrar el alcance del mismo. Por ello, les ha emplazado a una nueva reunión el próximo viernes para conocer más detalles.
Tal y como señalaba la semana pasada el consejero delegado de la entidad, José Antonio Álvarez, el ajuste afectará a personal en España, Portugal, Polonia y Reino Unido. De acuerdo con las mismas fuentes, el ajuste responde a necesidades económicas derivadas de la crisis de la Covid-19 y la cada vez más importante digitalización del sector. Este proceso se enmarca dentro de la estrategia One Europe que pondrá en marcha el banco en los próximos meses y que busca conseguir un ahorro de costes de unos mil millones de euros en dos años.
El objetivo de empresa y sindicatos es garantizar que el ajuste que ahora se plantea se haga de la forma menos traumática posible para la plantilla. Para ello, Banco Santander ha contratado al despacho Sargadoy, especialista en derecho laboral, tal y como ha adelantado La Información. Es por ello que se tratará de llevar a cabo prejubilaciones y bajas incentivadas, confirman las mismas fuentes.
Este ajuste, que aún no tiene una cifra oficial pero que podría rondar los 3.000 empleados, afectará tanto a la red de sucursales de la entidad como a los servicios centrales y al centro corporativo, en un esquema muy similar al que anunciaba Banco Sabadell hace apenas unos días.
El propio consejero delegado de la entidad reconocía en la rueda de prensa posterior a la presentación de resultados la necesidad de llevar a cabo ajustes de plantilla en todos los países en los que operan en Europa "para adaptarlo a las nuevas realidades del negocio hoy". En este sentido, cabe recordar que Santander ya ha llevado a cabo importantes ajustes de plantilla que han supuesto unas 4.000 salidas entre los años 2018 y 2019.
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