Nueva inyección de capital

Santander carga munición en PagoNxt, su 'buque insignia' en pagos digitales

La entidad que preside Ana Botín continúa con el proceso de dotación de recursos para que su fintech despliegue todas sus capacidades con la plataforma de pagos Getnet ya dentro de su perímetro. 

Pagonxt, fintech de pagos del grupo Santander
Pagonxt, fintech de pagos del grupo Santander
Banco Santander

Banco Santander continúa propulsando su gran aventura en el mundo de los pagos. La entidad que preside Ana Botín ha cargado nueva munición de capital a PagoNxt con una 'bala' de 10,65 millones de euros. Este músculo financiero adicional se destinará al despliegue del área de las soluciones de pago para comercios (Merchant Solutions), que ya cuenta con cerca de 54 millones de euros para su desarrollo. La vertiente dirigida a las empresas constituye el 'portaviones' de la fintech que, junto a la toma de la plataforma de pagos Getnet, le abre el camino para crecer a gran velocidad y a una escala global.

PagoNxt, capitaneada por Javier San Félix, se divide en tres unidades: Trade Solutions, Consumer Solutions y Merchant Solutions. Esta última es precisamente la que mayor aportación hace a la fintech del grupo Santander y la más importante en cuanto a volumen, por lo que la nueva ampliación inscrita ya en el Registro Mercantil forma parte del proceso natural para dotarla de recursos en una fase de enorme crecimiento y con afán de capacitarla para explorar todo su potencial. El gran salto está por llegar, pues justo ahora ha entrado en su perímetro Getnet procedente del spin-off llevado a cabo en la filial del Santander en Brasil. La intención es desplegar esta plataforma por toda Europa gracias a los activos tecnológicos de la quebrada Wirecard, que se fue al traste por un déficit operativo y otros problemas de control. 

Getnet, su marca estrella, es una de las soluciones de pagos para empresas más fuertes del grupo en Latinoamérica. Su éxito, que germinó en Brasil y se ha ido expandiendo a Argentina, Chile o México, pretende ahora conquistar el Viejo Continente siendo parte de PagoNxt Merchant Solutions. Para operar estratégicamente dentro de su estructura global de pagos y poder aportar una mayor eficiencia, se decidió escindirla de la filial brasileña. Esta vía se eligió por un motivo básicamente táctico. El grupo no quería verse en la necesidad de tener que valorar un activo que contaba con minoritarios en su capital. Con su salida a Bolsa se les da la opción de acompañarles en esta hazaña o de no continuar. 

La fintech está volcada en invertir en su crecimiento y ser rentable no es una prioridad en estos momentos: aporta pérdidas de más de 200 millones

El grupo con sede en Boadilla del Monte tiene claro que debe apostar firmemente por estar en el mundo de los pagos digitales ante el auge de nuevos competidores. Con PagoNxt hace frente a las fintech que atacan y comen espacio a la banca tradicional, mientras tiene como soporte a una entidad de referencia como Santander que entiende el negocio bancario y aporta seguridad. Generar rentabilidad no es una prioridad para la fintech en estos momentos en los que está volcada en ganar cuota de mercado. Su principal objetivo ahora es no dejar de invertir en su crecimiento, por lo que es previsible y lógico que este tipo de inyecciones de capital sigan sucediéndose. 

Las últimas cuentas disponibles del grupo Santander arrojan un incremento de los costes de explotación del 4%, hasta los 15.778 millones de euros. Este alza se debe principalmente al repunte generalizado de la inflación y a las inversiones en desarrollo tecnológico y digital en PagoNxt. Mientras el banco continúa apostando por este proyecto, las pérdidas que este registra ascienden ya a unos 206 millones de euros. Incluso antes de impuestos, los números rojos se sitúan en 191 millones de euros. 

Está presente en más de una quincena de países, la mayoría donde está Santander, pero no pone límites a su alcance

PagoNxt apenas tiene 15 meses de recorrido vital pero ya cuenta con unos 3.000 empleados y está presente en casi una quincena de países. Es cierto que existe un enorme solape con las geografías en las que opera Santander, pero la fintech no se pone límites. Quiere llegar allá donde existan clientes que demanden sus servicios aprovechándose de la oportunidad que ofrece la tecnología para llevar el negocio a un país sin la obligación de tener que crear un equipo. Ebury, otra de las firmas que forman parte de esta gran plataforma de pagos y que se enmarca concretamente dentro de la unidad de Trade Solutions, es un ejemplo claro de esta fórmula de mercado abierto.

Además de su expansión internacional, PagoNxt también aspira a lograr acuerdos con terceros como método para complementar sus servicios, a ampliar su visión subiéndose a las nuevas modas digitales que vayan llegando y captar clientes que no procedan del canal Santander. Para alcanzar todas sus metas necesita de capital que es aportado íntegramente por Santander, pues aunque sea una entidad autónoma e independiente depende al 100% del grupo cántabro. La firma podría valorar en un futuro dar entrada a capital privado para continuar ganando flexibilidad, algo que es posible que genere un importante interés en el mercado debido al enfoque y a la apuesta tan firme por la tecnología en un mundo cada vez más digitalizado. 

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