Tras la oferta extraordinaria

Siemens Gamesa dejará de cotizar en bolsa a partir del próximo 7 de febrero

Cuando se liquiden la totalidad de las operaciones, las sociedades rectoras de las bolsas de valores de Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia excluirán de cotización a la entidad durante un tiempo indeterminado.

La CNMV autoriza definitivamente la exclusión en bolsa de Siemens Gamesa.
Siemens Gamesa dejará de cotizar en bolsa a partir del próximo 7 de febrero.
DPA vía Europa Press

La exclusión de negociación de las acciones de Siemens Gamesa en las bolsas de Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia, ha sido aprobada este viernes por el Comité Ejecutivo de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), según apunta un comunicado que provoca la suspensión de las acciones de la compañía. 

La solicitud de exclusión fue presentada por la propia Siemens el pasado 25 de enero. La exclusión definitiva se producirá cuando finalice la oferta extraordinaria de compra de acciones por parte de Siemens Energy. El pasado 23 de diciembre, la firma energética inició una orden sostenida de compra de acciones sobre la totalidad de los títulos de Siemens Gamesa de las que no es titular. Esta oferta contempla un precio de compra de 18,05 euros por acción y estará vigente hasta el 7 de febrero.

Las acciones de Siemens Gamesa permanecerán suspendidas de negociación hasta que finalice la orden de compra sostenida. Cuando se liquiden la totalidad de las operaciones, las sociedades rectoras de las bolsas de valores de Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia excluirán de cotización a la entidad.

El doble de pérdidas

Durante su último trimestre fiscal, la empresa llegó a registrar unas pérdidas netas de 884 millones de euros, lo cual implica que sus números rojos se dupliquen en comparación con las cifras registradas en el año anterior. De esta forma, los nuevos pedidos de la filial de Siemens Energy, apenas alcanzaron un valor de 1.609 millones de euros, lo que implica una caída del 33% durante 2022. 

Pese a los 2.008 millones de euros conseguidos mediante las ventas, estos beneficios se quedan cortos para una cartera que se situó en 33.698 millones de euros durante el cierre de diciembre. Además, Siemens está llevando a cabo un proceso de reestructuración en el que se despedirá como mínimo a 2.900 trabajadores de su plantilla global. En términos nacionales, habrá 352 empleados que serán cesados por la compañía. 

Las perspectivas de la compañía para el 2o23 implican una vuelta a la rentabilidad como la prioridad absoluta en un mercado más normalizado gracias a la estrategia de tres ejes orientada en: un crecimiento de las ventas, los resultados del programa Mistral y la fortificación de las relaciones a largo paso con los suministradores. 

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