Telefónica elevó un 3,2% los ingresos del grupo durante el primer trimestre del año, si se cuenta el volumen de negocio generado por la 'joint venture' con Virgin Media en Reino Unido, que no consolida desde el año pasado dentro de la estructura del holding. El beneficio neto completo del grupo, sin contar con el negocio británico, se redujo un 20%. La deuda neta financiera se situó en los 27.450 millones de euros. El negocio español, especialmente vigilado por los analistas del mercado debido a la dura guerra de precios que se libra desde hace varios años, creció en facturación completa cerca de un 1%. Las acciones de la compañía se elevaron un 2,64% en bolsa tras la presentación de sus guarismos.
Los resultados de este primer trimestre están siendo afectados por la comparación con un periodo en el que no se consolidaba el negocio británico antes de la fusión con Virgin Media. Por diversos motivos, vinculados especialmente con la deuda, Telefónica decidió no incluir en el perímetro ese 50% de la 'joint venture'. Esta exclusión afecta ahora a los números. En los tres primeros meses del año se ingresaron 9.410 millones de euros, lo que supone una caída del 9%. Si se incluyera el volumen de Reino Unido habría crecido un 3,2%. Todos los mercados registran incrementos, con buenos comportamientos en Brasil y Latinoamérica afectados también positivamente por la evolución de las divisas.
En términos de rentabilidad, la afección es muy similar. El resultado bruto de explotación (Ebitda) se redujo un 6,4% sin contar con Reino Unido hasta rozar los 3.200 millones. Si se incluyera habría crecido un 6,5% hasta superar los 1.100 millones. Donde no se ha hecho el ejercicio de comparación es en el beneficio neto completo de todo el grupo. Éste se recortó un 20,3% hasta los 706 millones, al no contar con la aportación británica. Si se descuentan efectos como las reestructuraciones, plusvalías y otros impactos, ese resultado neto ascendería a 720 millones.
El mercado español, especialmente vigilado por los inversores, ha logrado incrementar casi un 1% su volumen de negocio en un momento de especial dureza comercial, con una guerra de descuentos entre las diferentes operadoras. Hay que tener en cuenta que lo que se conoce como ingresos por servicio (los tradicionales de conectividad) se recortaron un 1,4%. La diferencia procede de la venta de terminales móviles que se ha disparado hasta los 153 millones de euros como consecuencia de la política comercial asumida en las antiguas tarifas de Fusión.
Ese incremento de los ingresos españoles no se ha visto traducido en la rentabilidad, impactada por los elevados costes de la energía y por un mayor crecimiento de ingresos de menor margen como son los terminales móviles. Se ha compensado parcialmente por la generación de ahorros vinculados a la salida de 2.300 empleados desde principios del mes de febrero. Se reduce en 42.000 los clientes de paquetes convergentes en 42.000 pero el ingreso medio se eleva de nuevo un 1,5% hasta los 91 euros.
Otros mercados y la deuda
Respecto a otros mercados, los ingresos crecieron en todos con especial incremento de Brasil (+18%), Latinoamérica (+11%) y Alemania (+5%). En términos de rentabilidad, también crecen muy significativamente los dos primeros, impulsados por la evolución positiva de los tipos de cambio -que en el pasado se convirtieron en un problema relevante-. La división tecnológica (Telefónica Tech) ha elevado de manera relevante su negocio, con un crecimiento -sin incluir las adquisiciones que se hicieron efectivas en el último año- del 30%. Rozaron los 300 millones de euros de ingresos.
En cuanto a la deuda neta financiera, se incrementó en algo más de 1.400 millones de euros durante el primer trimestre respecto al cierre del ejercicio anterior. El factor principal es la evolución de los tipos de cambio (1.500 millones de euros), pero también hay otros como los compromisos laborales para los planes de salidas (228 millones) o la retribución al accionista (221 millones). Ese incremento de los tipos de interés elevó un 21% los gastos financieros netos. Del total del pasivo, más del 80% es a tipo fijo. La posición de liquidez se coloca por encima de los 22.300 millones de euros, con cobertura de sus vencimientos hasta más allá de 2024.
La operadora asegura que se encuentra en línea para alcanzar los objetivos financieros de 2022, que se basaban en un crecimiento de un dígito bajo tanto en ingresos como en Ebitda (sin contar con la inversión en espectro radioeléctrico) y un ratio de inversión (Capex) sobre ventas de hasta el 15%. Confirma, por tanto, los objetivos y también la remuneración al accionista, con el dividendo de 0,30 euros por acción de este año que se pagará en diciembre y en junio de 2023 totalmente en efectivo.
En el lado de la infraestructura, Telefónica asegura que ya se han iniciado discusiones con inversores para que tomen el 45% de la nueva compañía de fibra (fibreco) que se está construyendo en España para desplegar esta infraestructura en zonas rurales de baja densidad de población. También se mantienen negociaciones con potenciales socios para que se queden con el 50% de una compañía similar para el mercado británico, con el que llevar estas conexiones de alto rendimiento a 7 millones de hogares hasta 2027.
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