Telefónica cierra el tercer trimestre del año con una leve mejora en el rendimiento comercial, pero con un golpe en sus finanzas por la situación económica en Argentina. La operadora ha provisionado un deterioro de 785 millones de euros por un ajuste de valoración de la filial, lo que ha hecho que el beneficio se haya recortado un 50% en los nueve primeros meses hasta los 671 millones de euros. Al margen de este ajuste, la operadora ha recortado los ingresos un 10,7% hasta septiembre, aunque con una mejora en los últimos tres meses respecto al trimestre anterior.
La situación macroeconómica en Argentina pasa factura a las cuentas. La calificación como economía hiperinflacionaria y los crecientes problemas financieros del país han obligado a la operadora a sanear su participación en la filial. En total son 785 millones de euros que impactan en el beneficio neto de los nueve primeros meses y lleva a pérdidas durante el tercer trimestre de 160 millones de euros.
Junto al impacto de Argentina, la operadora también sufre también el impacto de la pandemia global del coronavirus, con una reducción del beneficio bruto de 315 millones de euros, y la depreciación de las divisas (-358 millones de euros), según los resultados que ha comunicado hoy ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Más allá de los ajustes, los ingresos también se ven impactadnos principalmente por el coronavirus y los tipos de cambio. Al primero le asignan una caída de 591 millones de euros durante el tercer trimestre, mientras que a los segundos le atribuyen 959 millones de reducción. En total, el volumen de negocio cae un 12% a los 10.461 millones en ese periodo y un 10,7% hasta septiembre. Sí que se percibe una mejora frente al trimestre anterior, pues se registran 2,7 puntos porcentuales menos de descenso.
En el lado de la generación de caja, la operadora también corrige la caída del segundo trimestre tras la primera sacudida de la Covid-19. En total, el flujo de caja libre asciende a 1.579 millones de euros (frente a 988 millones de los meses entre abril y junio). Eso ha permitido reducir la deuda en 525 millones de euros frente a junio, pese al pago del dividendo y los gastos vinculados a la reestructuración de la plantilla. En total, el pasivo neto roza los 43.000 millones, incluyendo los arrendamientos operativos.
El coronavirus ha impactado en las cuentas de la operadora, pero la compañía presume de una fuerte posición de liquidez para afrontar los próximos trimestres. Asciende a 22.400 millones de euros entre la caja y las diferentes líneas de crédito. La vida media de la deuda roza ya los 11 años.
Por otra parte, hoy mismo la operadora ha anunciado que propondrá a la Junta General de Accionistas -que aún no tiene fecha de celebración- la amortización de acciones de autocartera que representen el 1,5% del capital. Gran parte de estos títulos han sido adquiridos, en su mayor parte, durante los últimos meses.
Todos caen menos Alemania
Por mercados, sólo Alemania logra una mejora en los ingresos de apenas el 0,4% en el trimestre. En España se reducen un 4,3% hasta los 9.200 millones, mientras que Reino Unido caen un 10% y Brasil e Hispam se recortan un 31% y un 13,6%, respectivamente. Por su parte, el negocio de Telxius se recortó un 2,8%, mientras que el referido a Tech (nube, big data y ciberseguridad) crecieron un 10,5%.
Pese a todo, el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, asegura que Telefónica continúa mostrando su "fortaleza" ante el mercado. "En el tercer trimestre mejoran las tendencias, con una clara recuperación de la actividad comercial en nuestros mercados clave. Crecemos en ingresos respecto al trimestre anterior", asegura el primer ejecutivo.
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