Tot-em, el secreto de convertir una frase de amor en una joya... y ganar dinero

  • La 'startup' creada por dos jóvenes estudiantes madrileños en 2015 facturó 500.000 euros en 2018 y aspira a superar el millón en 2020.
Tot-em
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La frase de un amigo, un "te quiero", la voz de tus abuelos, el canto de un pájaro, el ladrido o el maullido de tu mascota, el sonido de las olas del mar...  Tot-em (tot-em.com), una startup creada en 2015 por dos veinteañeros estudiantes madrileños de ingeniería, Javier Pérez y Javier Jiménez, convierte los sonidos en joyas o esculturas únicas para llevar al cuello, en un dedo, en la muñeca o poner en una estantería de tu casa.

Así, han logrado vender ya más de 80.000 'Tot-ems' únicos, 30 de ellos en su primer mes de vida, y su facturación ha ido creciendo de manera exponencial desde los 130.000 de su primer año al medio millón de 2018 y sus expectativas pasan por llegar a los 750.000 euros este año y alcanzar el millón de euros en 2020. En ese proceso será clave la expansión internacional que piensan abordar, sobre todo, en Estados Unidos, ya que hasta ahora el 95% de sus ventas se producen en España y sólo un 5% fuera de nuestras fronteras, principalmente en Alemania.

"Los sonidos son muy variados, desde futuras madres que graban el latido del corazón de su bebé en su útero, viajeros que quieren recordar una frase de su aventura, la voz de un abuelo con su dicho de siempre, hasta pedidas de matrimonio", cuenta Javier Pérez, uno de los fundadores. Javier Jiménez se refiere a su significado: "Creemos que la comunicación en Whatsapp puede llegar a ser fría, con tu tot-em sientes cerca a la gente que te quiere".

Pero Tot-em es mucho más que una forma de comunicación. "Cuando llevas un tot-em estás llevando innovación, estás llevando creación, estás rompiendo las reglas e inventando unas nuevas", aseguran. "La vida trata de coleccionar grandes momentos y no queríamos que se perdieran todos esos sonidos que los acompañan; queremos que todo el mundo pueda llevarlos lo más cerca posible, y recordarlos y escucharlos cuando quieran", afirman desde el equipo, en el que ya trabajan 10 personas. Además de convertirse en objetos de diseño ideales para regalar, los audios pueden escucharse sin límite en un apartado de su web gracias a un código único que la startup facilita a la entrega del producto.

A través de un programa informático convierten el dibujo de la onda de cualquier sonido en 3D y de ahí en un objeto para llevar siempre contigo. Trabajan en madera, metacrilato y acero, cada uno de ellos con diferentes formatos. Lo que diferencia a Tot-em es que es único para cada persona, dando la oportunidad de crear sus propios objetos con el sonido que más le identifique. Además, son objetos duraderos y sólidos que se convierten en un símbolo totalmente personal.

Tot-em se caracteriza por ser 100% digital, utilizando su e-commerce como único canal de venta y las redes sociales como escaparate. Cuentan con una fiel comunidad de más de 80.000 personas a nivel internacional, que comparten la cultura de la marca, considerándolo un regalo perfecto y lleno de significado, que entregan entre 48 horas y una semana después del pedido y por un precio que va desde los 10 hasta los 70 euros. Sus fundadores, con apenas 20 años y una inversión inicial de 800 euros recaudados entre familiares y amigos, decidieron embarcarse en la empresa compaginando su tiempo con las clases en la universidad.

Ahora han dado un paso un poco más allá y han convertido algo de reminiscencias medievales como es el ‘pacto de sangre’ para personas que quieran plasmar “un vínculo emocional muy fuerte” en algo tangible como un certificado o una joya.

El sistema que ha creado Tot-em posibilita a dos o más personas hacer un pacto de sangre y unirse para siempre y desde que lo lanzaron en enero ya han ‘vendido’ más de 200 pactos de sangre. Por un precio que va desde los 35 hasta los 55 euros por el certificado y 45 por el collar, Tot-em ha creado un sistema para que las personas se pinchen en el dedo con una aguja - para que no haya riesgo de contagio de ninguna enfermedad a través de la sangre el kit incluye varias lancetas esterilizadas, similares a las que usan, por ejemplo las personas diabéticas para hacerse análisis de azúcar, y pequeñas pipetas para dos, tres o incluso cuatro personas- y después depositen la gota de sangre sobre los extremos de una superficie de algodón prensado y así la sangre se acaba uniendo en el centro. El vínculo queda fijado y acreditado en un certificado o en un collar.

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