El fabricante japonés de vehículos Toyota estima que no será capaz de cumplir con su objetivo de producción de vehículos del ejercicio fiscal en curso debido a los ajustes de manufactura por la persistente escasez de semiconductores. La firma automotriz, líder mundial por volumen de ventas, anunció hoy un nuevo ajuste de producción para noviembre, tras el que espera que su previsión para su año fiscal, que concluirá el 31 de marzo de 2023, "sea más bajo que el pronóstico anterior de 9,7 millones de unidades", según señaló en un comunicado.
Toyota suspenderá las operaciones de once líneas de producción en fábricas de Japón de dos a nueve días "debido al impacto de la escasez de semiconductores", a raíz de lo cual espera producir unos 800.000 vehículos en dicho mes, unos 250.000 en el país matriz y unos 550.000 en el extranjero, detalló en el anuncio.
"Sigue siendo difícil mirar hacia el futuro debido al impacto de las piezas de semiconductores y otros factores", añadió la empresa, que no facilitó cifras actualizadas sobre su estimación de producción anual. El fabricante automotor japonés viene haciendo repetidos ajustes en su producción debido a los esporádicos brotes epidémicos en países asiáticos y los problemas en la cadena de suministro de componentes, especialmente de semiconductores.
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