El tren de mercancías español pierde fuelle y sigue sin sacar tajada del 'pastel' europeo. Apenas cuatro de los doce operadores ferroviarios con actividad en el país efectuaron transportes internacionales en 2019. La lista incluye a Renfe Mercancías, Transfesa Logistics (participada en un 20,35% por la primera), Captrain España (SNCF) y Medway España (filial de la firma homóloga portuguesa). Los trayectos dentro de las fronteras españolas también perdieron impulso. Así lo apunta el último informe sectorial de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), que cifra el total de ingresos que atesoraron estos operadores al cierre del citado ejercicio en 289 millones de euros, un descenso del 2,5% sobre 2018 y un paso atrás hasta los niveles registrados en 2016.
Ni siquiera la división de carga de la empresa que preside Isaías Táboas, líder indiscutible en la competición por actividad en la red nacional, se 'salva' de la regresión. Si los ingresos de los operadores alternativos experimentaron un recorte del 2,4% -hasta los 94,4 millones-, las ganancias que sumaron los trenes de Renfe Mercancías sufrieron un descenso ligeramente superior, del 2,5%, dejando unos ingresos a la empresa pública de 194,4 millones de euros frente a los 199,4 millones del año 2018. En términos de actividad, la carretera sigue imponiéndose, con dilatada ventaja, a las vías españolas.
La Asociación de Empresas Ferroviarias Privadas (AEFP) lleva tiempo alertando de la posición internacional del transporte ferroviario español de mercancías. Y es que nuestro país no ha pasado de ser un 'vagón de cola' en las listas europeas. Frente a la media del 18% que se estila en Bruselas, la cuota modal del tren en el país no llega al 5% del total de carga transportada por la vía terrestre, según marcan las últimas estadísticas de Eurostat, de abril de 2020. La AEFP ya ha urgido al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que dirige José Luis Ábalos, a aplicar una serie de incentivos -por más de 200 millones anuales- para catapultar al sector en el ranking europeo. También a poner en marcha una batería de medidas que den alas a sus trenes, como la congelación de los cánones por uso de la infraestructura o el veto temporal a los peajes de las redes transfronterizas.
Aunque ninguno de los operadores españoles se libra del 'tijeretazo' a los ingresos, la división de Renfe que lidera Joaquín del Moral Salcedo acaparó 194 millones de los cerca de 290 generados en conjunto por el tren de carga en España. La 'porción' de la compañía pública supone más de un 67% de los ingresos nacionales por esta vía en 2019, un porcentaje que da cuenta de las dificultades a las que aún se enfrentan las compañías privadas para competir con el operador estatal, dieciséis años después del pistoletazo de salida de la liberalización del transporte ferroviario de mercancías.
Durante la pandemia, los operadores privados han ganado peso en la balanza nacional en cuanto al volumen de mercancías transportadas, al elevar su cuota del 33% al 39%, entre 2019 y 2020.
La evolución de los ingresos de las empresas alternativas en 2019 rompió el incremento sostenido en toda su serie histórica, que comenzó hace ya siete años, cuando el conjunto de operadores atesoró 45,1 millones al cierre de 2013. Las cifras que ha publicado la CNMC se corresponden al ejercicio anterior a la eclosión del coronavirus, que rebajó el volumen transportado por tierra, mar y aire. Así, la filial de tráfico de mercancías de Renfe acumuló 40 millones de pérdidas desde enero hasta noviembre de 2020, un 21% más que en el año previo. Además, en el marco de la crisis sanitaria rebajó en un 19% la cifra de toneladas transportadas.
En total, durante el segundo trimestre del pasado ejercicio, se llegaron a transportar en España por ferrocarril cerca de 5 millones de toneladas de mercancías, un 25,7% menos que en el mismo período de 2019. Del total, un 39% del volumen lo acapararon los operadores privados, mejorando su peso en la balanza nacional respecto al año 2019, cuando su cuota apenas rondó el 33%. En términos absolutos, Renfe movilizó 17 millones de toneladas de mercancías en 2019, frente a los 8,7 que, en suma, transportaron sus competidores. Para el operador público, este volumen recorta un 7,1% el resultado del año previo; mientras que para el conjunto de empresas privadas, este volumen supuso un incremento del 0,7%, lo que mejoró los resultados del ejercicio precedente.
A los operadores ferroviarios aún les queda camino por andar para ganarle terreno a los camiones. Según Eurostat, del volumen total de mercancías transportadas en España por kilómetro a lo largo del primer trimestre, solo el 5% se traslada por la vía ferroviaria, mientras que las carreteras se llevan un 95%. El informe de la CNMC confirma el escenario. La cuota modal del tren de carga se situó en 2019 en el 4% en cuanto a toneladas netas por kilómetro -empeorando la proporción del 4,2% que registró en 2018-. Este desequilibrio se traduce en las cuentas. De los cerca de 20.000 millones que España ingresa de media cada año por el transporte pesado, solo 350 los acaparan los operadores ferroviarios.
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