La letra pequeña del Dora

Barajas saca ventaja a El Prat tras el fiasco de la ampliación en el DORA

El ministerio priorizará este Dora II en el plan ‘verde’ frente al aumento de capacidad, que apenas aumentará en los próximos años. La ampliación en Madrid destaca como gran inversión en aeropuertos.

Raquel Sánchez
Raquel Sánchez
Europa Press

Tras decidir que las tarifas a las aerolíneas se mantendrán congeladas durante los próximos cinco años, el Gobierno de España ha desgranado este miércoles la letra pequeña del Documento de Ordenación Aeroportuaria (Dora). La encargada de hacerlo ha sido la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, quien ha destacado que el nuevo Dora garantiza unas tarifas “competitivas”, aspecto clave para asegurar la recuperación de las aerolíneas que han sufrido el golpe del coronavirus. El nuevo marco de entendimiento entre operadores y gestor aeroportuario marca unas inversiones destacadas en aeropuertos como el de Barajas, un aspecto que choca frente a la ausencia del otro gran proyecto previsto hasta hace unos meses: la ampliación para El Prat.

Desde el ministerio se ha insistido en reforzar el aeropuerto de Madrid-Barajas, que actualmente concentra un 30% del tráfico total de la red de Aena, para que amplíe su hegemonía como “la puerta de entrada de Europa a Latinoamérica”, según palabras de la propia ministra. Estas inversiones tendrán un efecto impulso sobre el PIB de la Comunidad de Madrid, que repuntará desde el 9,3% al 12% una vez culmine el proyecto. La inversión regulada recogida en este Dora II para Madrid- Barajas es de 404 millones de euros, si bien únicamente 133 millones se dedicarán a la ampliación, que se materializará a partir de 2027. Otras infraestructuras estratégicas para este periodo son el aeropuerto de Alicante, Elche y Lanzarote. También el de Tenerife Sur, cuya ampliación está prevista para 2027.

El refuerzo del aeropuerto de la capital choca con la eliminación de la ampliación en El Prat, en Cataluña. “Como catalana me entristece”, ha declarado la ministra. El proyecto para el aeropuerto de Cataluña contemplaba en este Dora unas inversiones iniciales de aproximadamente 120 millones de euros, si bien la totalidad de la inversión, que se debía extender hasta el Dora III, ascendía a 1.700 millones. Aunque Gobierno central y Generalitat llegaron a un principio de acuerdo sobre cómo gestionar la transformación del aeropuerto, las tensiones de última hora con el Ejecutivo catalán echaron por tierra el plan. Según explican fuentes del ministerio, estos 120 millones se dirigirán ahora a planes transversales de carácter medioambiental, sin redirigirse a ningún aeropuerto concreto.

La ministra ha declarado que Aena alcanzará los 348 millones de pasajeros de capacidad en toda su red de aeropuertos una vez se ejecuten las inversiones del Dora. La cifra apenas incrementa la capacidad actual que tiene la compañía semipública, pues las inversiones del Dora II no perseguían fundamentalmente este objetivo, según han transmitido fuentes del ministerio. La cantidad total de dinero destinado alcanzará los 2.250 millones de euros, con un ritmo inversor de 450 millones de euros por año. Además de la remodelación y ampliación de aeropuertos, estas inversiones contemplan otros proyectos, como un pionero plan fotovoltaico.

Tarifas congeladas

La decisión de congelar las tarifas para el próximo año se llevó a cabo tras tomar nota de las recomendaciones del gestor aeroportuario, de los operadores y de organismos supervisores como la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC) y la Dirección General de la Aviación Civil. Uno de los principales motivos ha sido la desviación entre los datos de la demanda recogidos por Aena y los que ha anotado el propio ministerio. El Ejecutivo, que prevé recuperar los niveles de tráfico previos a la pandemia en 2025, ha contabilizado 16 millones de pasajeros más que los proyectados por el gestor aeroportuario durante el próximo quinquenio.

Con la nueva decisión, las tasas aeroportuarias se mantendrán igual hasta el próximo 2026, imposibilitando ninguna subida ni tampoco rebaja en cinco años. La postura del Ejecutivo se acerca a las recomendaciones de Competencia, que sugirió aplicar un -0,44% tras analizar las previsiones de tráfico aéreo y las inversiones previstas por el gestor aeroportuario en sus instalaciones. 

Las previsiones de tráfico de Transportes son más optimistas que las de Aena

La decisión elevada el martes ante el Consejo de Ministros y presentada este miércoles no cumple al completo los deseos de Aena, pero tampoco se aleja en exceso. La compañía presidida por Maurici Lucena reclamaba una subida del 0,52% de las tarifas hasta 2025, si bien en 2026 dicha subida debía ser ya del 2,39%, atendiendo a la previsión de la recuperación de los niveles de tráfico aéreo. Ayer, martes, declaró en un comunicado que “este Dora da estabilidad y será el impulso para la recuperación del sector”.

Las aerolíneas, por su parte, acogieron el anuncio con "reservas". En opinión de la patronal ALA Spain, la propuesta final era el resultado "menos malo de los escenarios posibles", ya que las tarifas no iban a subirse como proponía Aena. Este extremo "hubiese desincentivado el tráfico aéreo y, por tanto, la economía y el empleo", añadió el presidente de ALA, Javier Gándara, en un comunicado.

Mostrar comentarios