Una nueva vuelta de tuerca a la deuda financiera de las sociedades de Alberto Cortina y Alberto Alcocer. A través de Imvernelin Patrimonio, los empresarios han logrado posponer el pago del millonario pasivo que mantienen con la banca acreedora. Una sociedad patrimonial con la que son propietarios de más del 8,6% de la constructora ACS.
A finales de 2016, Imvernelin debía más de 143 millones de euros a las entidades bancarias, que vencían a corto plazo. Sin embargo, al cierre del último ejercicio 2017, esa cifra se ha ampliado, hasta los 178 millones y se ha prorrogado su vencimiento a largo plazo, es decir, a más de un año.
En cambio, con la otra sociedad patrimonial, Corporación Financiera Alcor, que opera como paraguas de Imvernelin, la deuda con entidades financieras 'ha desaparecido' respecto a los 40 millones de euros que sumaba a finales de 2016. Pero no es el único pasivo que mantiene esa sociedad de cabecera, dado que Alcor elevó un 32% las deudas con empresas del grupo, hasta 237,7 millones, según detallan sus respectivas memorias anuales.
Esta no es la primera vez que 'Los Albertos' renegocian su deuda en los últimos años. Ya lo hicieron en plena crisis, cuando su pasivo con la banca alcanzaba los 650 millones de euros. Poco después iniciaron su repliegue, reduciendo su exposición a Ence, por ejemplo, hasta dejar su deuda en las cifras actuales.
Freno en seco de su negocio
Ni Corporación Financiera Alcor, ni Imvernelin Patrimonio dan detalles concretos de cómo ha evolucionado su actividad más allá de las grandes cifras. La primera se dedica a los servicios financieros, mientras que la segunda está enfocada a la compraventa de bienes e inmuebles. Y ambas han frenado en seco su actividad en el último año. Un desplome de su volumen de negocio (Alcor sólo 'ingresó' 0,81 millones; e Imvernelin, no tuvo), frente a los casi 83 millones que sumaron un año antes.
Como consecuencia de esa parada en seco de su negocio se ha desplomado también su rentabilidad, a pesar de que han capeado la evolución de sus cuentas gracias a aportaciones vía ingresos financieros. Juntas, su beneficio neto conjunto ha caído desde los 76,5 a los 7,2 millones de euros.
Sin embargo, el patrimonio que Alcocer y Cortina suman con sus sociedades, sobre todo gracias a las acciones que poseen de la constructora presidida por Florentino Pérez, sigue al alza. En 12 meses ha pasado de 768 a 775 millones de euros.
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