Fecha clave en el calendario de Unicaja Banco. La entidad pretende hacer frente a la migración de todos los datos informáticos de Liberbank a su plataforma tecnológica el fin de semana del 20 al 22 de mayo, según ha podido saber La Información en fuentes al tanto del proceso. No obstante, contempla la posibilidad de retrasar la delicada operación una semana más, acometiéndose en ese caso entre el 27 y el 29 de mayo, siempre y cuando en la primera fecha no pueda asegurar la correcta ejecución de la integración.
Mientras tanto, un batallón de medio millar de empleados está volcado en formar a la plantilla procedente del banco asturiano absorbido, que se va ampliando en función de las necesidades con las que se van encontrando. Otro equipo constituido por personal de los servicios centrales planifica los detalles de la migración, pues se trata de un acontecimiento de una gran envergadura para cualquier entidad. Todo los lazos deben estar completamente atados para no toparse con incidencias, como le ocurrió en su momento a Banco Sabadell con su filial británica TSB y que tantos dolores de cabeza le dio, además de sufrir un coste millonario en sus cuentas.
Los empleados encargados de impartir la formación recibirán una compensación económica de unos 1.840 euros, lo que supone un gasto para Unicaja cercano al millón de euros, y que podría ampliarse en 840 euros adicionales por persona en caso de que se apruebe una acción formativa de seguridad de forma presencial durante las dos semanas siguientes a la integración. A los trabajadores de Liberbank que reciben la formación se les ofrecerán cinco días de vacaciones y correrá a cargo del banco otros gastos previa justificación como la comida o el gasto por desplazamiento. Los quince días previos a la migración deberán realizar una acción de aprendizaje de refuerzo.
Si la integración se realiza en la primera fecha prevista, que es la favorita de Unicaja Banco, Liberbank dejará de existir definitivamente el lunes 23 de mayo, justo dentro de dos meses. La integración tecnológica marca un momento fundamental en todo proceso de fusión, puesto que supone unir bajo un único sistema toda la información comercial y los canales operativos de las entidades. Los preparativos son un asunto primordial, ya que un error podría desencadenar serios problemas de acceso para los usuarios. Este escenario podría verse empeorado por los intentos de fraude y ciberataques en caso de ruptura de la red.
Para evitar que ocurra un contratiempo, lo habitual es que se trabaje en base a un calendario realista y teniendo en cuenta todo tipo de eventualidad que pueda sucederse, con soluciones para cualquier imprevisto e incluso es frecuente contar con un plan de contingencia. En cualquier caso, no es descartable que se produzca alguna interrupción temporal de los servicios de banca digital o de herramientas como Bizum, sobre todo entre los clientes originarios de Liberbank, como ocurrió con la de CaixaBank y Bankia, que en noviembre de 2021 cerró la integración tecnológica más grande realizada en la historia del sistema financiero español.
El grupo dirigido por José Ignacio Goirigolzarri transmitió la información de 7,6 millones de clientes activos de Bankia con un volumen de 10,4 PetaBytes, equivalente a 45 veces la capacidad almacenada en Spotify o al peso de 1.800 millones de canciones en formato mp3 de alta calidad. Fueron más de 2.500 millones de documentos digitalizados, que aglutinaban DNIs, contratos, firmas, recibos o correspondencias, que extendidos en papel, ocuparían la superficie de más de 20.000 campos de fútbol. Su propio CEO, Gonzalo Gortázar, advirtió de que no era un asunto en absoluto fácil y lo calificó de extremadamente complicado. Finalmente superaron este reto con éxito, aunque como es normal muchos clientes del banco absorbido se sintieron incómodos hasta su adaptación durante las semanas y meses siguientes.
Paralelamente a este proceso, el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) con el que Unicaja pretende ahorrarse 97 millones al año -aunque le costará aplicarlo 368 millones- da el pistoletazo de salida en los próximos días. De hecho, el jueves de la próxima semana, el 31 de marzo, se producirá la primera oleada con unas 400 salidas. El banco andaluz firmó un acuerdo con los sindicatos para recortar la plantilla en 1.513 personas. Las adhesiones, como es habitual, superaron el cupo máximo de despidos, por lo que la dirección de la entidad ha analizado cada petición voluntaria y ha ido dando traslado de su decisión a cada solicitante.
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